“Tal vez la noche no sea más que e… párpado del día” me dijiste perforándose el tiempo que a nosot…

Soy un hombre maldito. Yo debía orientarme en sentido de tu huella… Señor, seguirla fiel, errar con el… y tras ella después plantar la mía… ¡Tanto pequé! Reí, mientras se ab…

Bandera solo el cielo, y patria el… Lo demás son mezquinas aunque subl… de las almas pequeñas, pequeñas, p… Bandera solo el cielo, y patria el… Lo demás: sinrazones impuestas por…

—Madre, no quisiera que me hundan en la tierra cuando… ni que tapien mi cuerpo en oscuros… ni que esparzan al viento mis ceni… ni me arrojen al mar por la cubier…

—El reloj gobierna las cosas, este… El reloj detiene la puerta, los de… El reloj entierra lo que su esfera choca. ¡Helo! Cuatro cuadrantes...

Construye tú la Torre de Babel con esperanza y aliento, con amor. Sea tu frente mortecina asiento de… sea tu carita redonda la otra luna que ilumine este andar de confusio…

Jardines y jardincillos... Un astro rojiamarillo salta la verja

La mañana volvía entre penumbras y rostros, bajo el dulce asomar de… el tiempo no marchaba, puesto que… ritmaba el aleteo urdiente de su c… La niña removió el cerrojo del ins…

Yo lo sé y aquí todos lo sabemos. Quizá otros lo han sabido y sentido y dolido El tiempo ha sido—en todo tiempo—

—Estoy aquí desde el Principio. Soy el origen y la luz. Soy el centro y la causa infinita. Soy la razón de ser de la ecuación…

35 Nunca entendí los motivos de escribir obras extensas... ¡Qué lejos vanse a buscar la verdad o la belleza!

Tú recoges las huellas de mis voce… y las tornas canción de mediodía con pecado inmortal, con poesía... y adelantas tus sueños más veloces… Nada raro si truena en altavoces

Los siete sellos los siete espíritus de Dios en forma de siete lámparas los siete ángeles /sus siete trompetas respectivas

[Esta fabulilla cómica la escuché a temprana edad: ni avalo sus argumentos ni sé si será verdad. Refiero esta breve fábula

Álvar Fáñez Minaya tú eres. Álvar Fáñez, el Cid Campeador ruega que partas desde Valencia a por doña Elvira, a por doña Sol… Los caballos te esperan enfrente,