El inmigrante
Dedicado a Bastian Levelt (Haitiano)
Mi país completo lo comieron los buitres,
todos codiciaban sus grandes riquezas,
las autoridades solo son unos títeres,
ya no queda nada, tan solo la pobreza..
Se deshizo la vida familiar, ciudades,
fuentes de trabajo, campos, las escuelas
faltan alimentos, todos son cesantes
el hambre disgrega las provincias enteras.
Por eso dejamos recuerdos y casa,
buscando trabajo, también dignidad,
pero solo somos mano de obra barata
y nos convertimos en lacra social.
El idioma siempre nos resultará extraño,
la comida ajena, muy amargo el pan,
queremos que pasen rápido los años,
y un día cercano volver al hogar…
Mandamos dinero a los familiares,
les mentimos dichas “estamos muy bien”,
las lágrimas caen, queremos besarles,
contemplamos fotos de un mundo que fue.
Las horas, los días, los meses son largos,
a veces de noche hay llanto escondido,
sufrimos mal trato; pero sin embargo
soñar el regreso ayuda a estar vivo.