#EscritoresEspañoles #Generación27 (1950-1956) Con contadas horas las
Estar cansado tiene plumas, tiene plumas graciosas como un lor… plumas que desde luego nunca vuela… mas balbucean igual que loro. Estoy cansado de las casas,
Urbano y dulce revuelo suscitando fresca brisa para sazón de sonrisa que agosta el ardor del suelo; pues si aquel mudo señuelo
Derriban gigantes de los bosques p… derriban los instintos como flores… deseos como estrellas para hacer sólo un hombre con su e… Que derriben también imperios de u…
Los marineros son las alas del amo… son los espejos del amor, el mar les acompaña, y sus ojos son rubios lo mismo que… rubio es también, igual que son su…
Quiero vivir cuando el amor muere; muere, muere pronto, amor mío. Abre como una cola la victoria pur… aunque el amante se crea sepultado… aunque grite:
He venido para ver semblantes Amables como viejas escobas, He venido para ver las sombras Que desde lejos me sonríen. He venido para ver los muros
Escondido en los muros este jardín me brinda sus ramas y sus aguas de secreta delicia. Qué silencio. ¿Es así
Así como en la roca nunca vemos La clara flor abrirse, Entre un pueblo hosco y duro No brilla hermosamente El fresco y alto ornato de la vida…
Adolescente fui en días idénticos… cosa grácil, visible por penumbra… y extraño es, si ese recuerdo busc… que tanto, tanto duela sobre el cu… Perder placer es triste
Yo no te conocía, tierra; con los ojos inertes, la mano alet… lloré todo ciego bajo tu verde son… aunque, alentar juvenil, sintiera… un tumulto sediento de postrarse,
En soledad. No se siente el mundo, que un muro sella; la lámpara abre su huella sobre el diván indolente. Acogida está la frente
Donde habite el olvido, En los vastos jardines sin aurora; Donde yo sólo sea Memoria de una piedra sepultada en… Sobre la cual el viento escapa a s…
Va la brisa reciente por el espacio esbelta, y en las hojas cantando abre una primavera. Sobre el límpido abismo
Como una vela sobre el mar resume ese azulado afán que se lev… hasta las estrellas futuras, hecho escala de olas por donde pies divinos descienden…
Cómo llenarte, soledad, sino contigo misma... De niño, entre las pobres guaridas… quieto en ángulo oscuro, buscaba en ti, encendida guirnalda…