Déjame, pensamiento, déjame, mañana seré tuyo, volveré a ser tu presa. Pero hoy, mientras la luz araña en los árbol…

Nadaba yo en el mar y era muy tard… justo en ese momento en que las luces flotan como brasa… de una hoguera rendida y en el agua se queman las pregunt…

Recuerda que tú existes tan sólo e… agradece tu vida a mis fantasmas, a la pasión que pongo en cada vers… por recordar el aire que respiras, la ropa que te pones y me quitas,

Sospechan de nosotros. Ha pasado el primer autobús, y nos sorprende en el lugar del crimen, desatados los cuellos y las manos a punto de morir, abandonándose.

Recuerdo que atardecía, recuerdo que vi su coche detenerse, recuerdo la compañía de sus ojos en la noche,

Está solo. Para seguir camino se muestra despegado de las cosas. No lleva provisiones. Cunado pasan los días y al final de la tarde piensa en l…

Tú me llamas, amor, yo cojo un tax… cruzo la desmedida realidad de febrero por verte, el mundo transitorio que me ofrece un asiento de atrás,

Déjame que responda, lector, a tus… mirándote a los ojos, con amistad… porque esto es la poesía: dos sole… y una experiencia noble de contarn… Año cincuenta y ocho. Vine al mun…

Mañana de suburbio y el autobús se acerca a la parada… Hace frío en la calle, suavemente, casi de despertar en primavera, de ciudad que no ha entrado

Si alguna vez no hubieses existido… si el calor de tus muslos no me hu… buscado como un látigo preciso y mis ambigüedades electivas —los días más oscuros de mí mismo—

En la noche profunda, como dormida caricia que sorprende y sigue a más, sombras con el calor de la materia… mordiéndose los labios, mal quitad…

En la mesa de al lado, un jardín de señoras en domingo abonadas al orden del murmullo y del té con limón, en un café de invierno por la tard…

Por septiembre se te llenan de sótanos los labios y es relativo el cielo después de haberte visto preguntar… Pero también el cielo,

Está solo. Para seguir camino se muestra despegado de las cosas. No lleva provisiones. Cuando pasan los días y al final de la tarde piensa en l…

Más o menos extraña la vida fue pasando tibiamente por tu cuerpo y el mío. Oigo la lluvia fría amontonarse sobre las uralitas