A Tatiana
Siempre me estoy yendo, nunca llegando La sensación que me habita es la de la despedida, la del destino del marinero,
Nunca te tuve nunca te perdí. Sin embargo persiste en mí el sabor de la derrota, la sensación que aparece justo
Esta mañana soñé contigo. Caminábamos juntos, temías, yo te decía lo de siempre: te amo.
En la mañana, cuando a lo lejos te veo, nace la impotencia del ave enjaula… Así estas corazón mío, con la nostalgia
Mi locura son sentimientos que quedan atrapados en palabras, pero vuelan
Sintiéndote, palpando la tibieza de tu vida, latido a latido entre mi mano: tu Sintiendo
Cada instante junto a ti, es un tesoro. Los guardo como presagio de la evocación del fantasma
Solo en mis sueños pequeña mujer, solo en mis sueños tomo tu mano, beso tu frente
La soledad no la para nadie, excepto tu. La soledad derribó mi paz,
¿Habrá un mundo o realidad paralela en la que puedo tomar tu mano besar tus labios pronunciar tu nombre
3.652 anocheceres y amaneceres y al final de la última vez, tu imagen, tan real y vívida. Poco a poco,
Ángel de tu guarda, en eso me he convertido. Tu dulce compañía, que en amargo silencio, atesoro en instantes intocables.
Malaya la hora en que me fijé y VI tu existencia. Malaya la hora en que te sentí y vi mi existencia. Malaya la hora en que te besé
Viejo sentimiento ¿porqué insistes en visitarme, una y otra vez? ¿qué quieres de mi? ¿mi vida?
Cuanto quisiera poder estrecharte al despedirme de ti. Decirte la falta que me harás, darte un beso, tomar tu mano