#Cubanos #Mujeres
Detén del mundo sideral el paso, ¡rey de la inmensidad!, que mi alm… bañarse anhela en tu radioso orien… y como águila audaz, sobre tu cumb… contemplar de placer estremecida
Dicen que cuando cubre la pureza una frente de virgen con su velo suaves miradas le dirige al cielo, y le dan las estrellas su belleza. Pero si el vicio mancha su limpiez…
¡Pensativa deidad! ¡cómo diviso tras ese velo de dolor amable que tu semblante angelical esconde… la adorable expresión de tu dulzur… el suave brillo de tus ojos triste…
Yo siempre al triste consolé afect… y la amarga indigencia socorrí, que así tal vez, en la desgracia,… me socorran a mí. Yo siempre a la vejez tendí mi man…
Hay un sepulcro con un nimbo de or… y allí enjugando su divino lloro un arcángel en pie, baña la santa losa ardiente y bell… de una radiante y solitaria estrel…
“Vuelves por fin, ¡oh dulce dester… “con tu lira y tus sueños, “y la fuente plateada “con bullicioso júbilo te nombra, “y te besan los céfiros risueños
Pasaron ya dos siglos, y no había quien hiciera inmortal el pensamie… cuando apareces tú, y un monumento alzas a la triunfante poesía. Tú a quien el mundo enajenado oía
Dulce, vaga, temblorosa y en el misterio velada, es una pupila hermosa que al mundo mira piadosa de lágrimas arrasada.
En medio de esta paz tan lisonjera que nunca turba doloroso invierno no sé por qué de mi alma se apoder… siempre un recuerdo pesaroso y tie… Un recuerdo tan grato como triste,
¿Amanece? ¿tengo alma? ¿el sol alu… este mar de tinieblas? Las altas palmas, del suplicio ant… son las cruces inmensas? El lucero del alba todavía
Erais con vuestras cándidas diadem… de gracia, de dulzura y poesía los ensueños azules de mi alma, la esencia de mi ser y de mi vida. Los óvalos de luz de vuestras fren…
¡Cómo te miro, al rayo de la luna, pálido, melancólico, marchito, sentado bajo el sauce que sombrea tu sepulcro tristísimo! ¡Cómo te miro, con el rostro suave
Dulce rayo de sol, que sorprendida a mi alcoba de virgen tan querida vi llegar una vez. Y entrando con amor por mi ventana me hablaste dulcemente de la Haban…
Con túnica de nácar, pasa pura una dulce, una espléndida figura más blanca que el jazmín. Es un ángel con alas estrelladas, un ángel celestial que lleva atada…
Sólo dejaron sus queridos pasos hojas de nardo y azucenas nítidas, y estelas brillantísimas de luna sobre el triste turquí de estas co… Y en sus frentes los nimbos temblo…