#mariajoseluquefernandez #poesia
Se sumen en el silencio los recuerdos, quedan en el vacío alojados, en ese cielo blanco que para mi, pintaste
Un, dos, tres, contaba Luisillo arrimado a la par… Cuatro, cinco, seis, se rasca, le pica la piel del pie. Siete, ocho, nueve, diez,
Entre las cenizas los restos de la vida la muerte que arrebata los sentidos, la guadaña que hace guardia
Y tus caricias trémulas e inquietas, el alma desnudan ya. @María José Lque Fernández.
Un cuadro en la cocina adorna la p… mi abuelo lo colgó, siendo yo chiq… Llegaba en la tarde buscando la tr… ambos nos sentábamos junto al calo… A veces había castañas, otras solo…
Transito No importa el destino cuando se sabe el origen, cuando el tránsito es camino abierto y límpido
Bailas y sonríes con tu vestido bl… princesa juegas a ser, la noche deslumbra la luna, versos que son de otros te conquis… Pureza del bosque te alumbra,
Ronronea, mama dormita, ojitos curiosea siempre vigilante, le arropa. Regazo ardiente. Duerme tranquilo, ojitos.
Somos energía pura que trasciende, materia en que reencarna, herramienta indeterminada, excarcelando etiquetas, liberando sueños.
Llegas a la cima, sin saber que er… portas en tu interior fuerza y vol… sin debilidad te recreas en tu ser… has creado a conciencia tu reflejo… luchas que no cejan corazón y ment…
Luz rubia y brillante Luna chiquita pero hermosa cielo sereno pero obscuro estrellitas que ya no lucen nube gris pero hermosa
Alma límpida cuya ascensión encumb… el gesto erróneo de la guadaña su fiel reflejo en el espejo te am… desde tu atril ejecutas sin observar el paso sobre la tier…
Ese sentir sereno que acompaña tu… reclama para si el cielo, la tierr… eres orgullo presuntuoso de quien… buscando sentido entre silentes mo… acompañas el ser dejando de tener…
Dos almas que se funden en un abra… una mirada incluso en la distancia… una caricia que no cesa, piel desnuda de sentimiento, costuras de la piel en que se entr…
Desde el autobús te ví y me cautiv… cinco intensos, eternos minutos no pude apartar la mirada mis neuronas se fundían con su luz mi corazón no entendía su llamada,