Torres de Inglaterra rodeada de briosos potros y arbolados prados de la tierra a cubrir
Caen los higos dulces y deliciosos se abre su piel roja y sustanciosa ¡Tomad su jugo
Tú, Madre sembradora de soles que en el cielo tejes
He adornado un pequeño altar. Allí arden viejas hojas de laurel aromatizando el ambiente
Dé camino a la sorpresa y la novedad. ¡¡Sorprenda gratamente a los suyos… cada día!!
Mi prisión repleta de jaurías de lobos furios… se convirtió en coloridas aves de dulce cantar.
!! Escuche a los sabios!!
Movía su rueca mágica mientras cantaba himnos angelicales.
No se apresure, no se apasione. La fortuna bendice a quien sabe esperar.
El sol doraba las altas cimas. Mientras mi corazón se revoluciona… en tumultuosa esperanza.
Importante es ser discreto al hablar.
Hasta para coger los frutos debes estirar los brazos.
La lluvia y el campo son compañeros. El viento mediador, cura el sufrir de la lluvia y cesa la sed
Mar, que la sed transforma en sal. Mar, espejo voraz,
Fronda que das olorosos racimos. Viña que destila dulce ambrosía de purpúreo color