ERES EL LADO ABSURDO DE MI DISCO DE DEPECHE MODE
Siento mi ombligo como un trozo de tocino al fuego,
también estoy fingiendo que tus caricias
son tan frías como las lociones de avon,
sin arder,
arden los ardidos,
bronceador para los ilusos quemarme al fuego,
o el deseo gira en el microondas.
Más tarde que temprano,
comprendí que era mejor quemar malvavisco,
que prender fuego a mis recuerdos.
Y recargo mi cabeza sobre tus días de mal humor,
dejó caer el tirante de mi sostén de una manera intencional,
me tomas de la garganta,
aún no se si la brutalidad de tener sexo en sitios poco convencionales,
nos convierta en superhéroes con ropa interior de aurrera
o dime al oído lo contrario,
me deseas
pero eres el lado absurdo de mi disco de depeche mode.
No te olvides de dejar mis gafas entre los senos cuando salgas de la rutina de tus días,
no todos los incendios intoxican las arterias donde late mi corazón.
Kundera busca entre sábanas el postre y muerde mis nalgas como un durazno.
Nada te despierta como la cercanía de mis dientes mordiendo tu indiferencia,
antes irte a la chingada,
déjame opciones en el cenicero
o desayunamos hormigas
o acudimos al menú del fakir,
los alfileres no alteran mi gastritis.
Marie Bardott.
Preferido o celebrado por...
