#SigloXX #SigloXXI #Uruguayos #1981 #PoemasDeLaOficina
Un país lejano puede estar cerca puede quedar a la vuelta del pan pero también puede irse despacito y hasta borrar sus huellas en ese caso no hay que rastrearlo
La muerte está esperándome ella sabe en qué invierno aunque yo no lo sepa por eso entre ella y yo levanto barricadas
Los años son también una armonía sólo que yo prefiero ser uno y desarmónico cuando todos afinan quiero desafinar como un violín
Lo cierto es que fueron años de arduo y pragmático aprendizaje, con lapsos de desaliento en los que estuvo a punto de desistir. Pero al fin triunfó la perseverancia y Raimundo aprendió ...
Prohibidos los silencios y los gri… las minifaldas y los sindicatos artigas y gardel la oreja en radio habana el pelo largo la condena corta
Por el desfiladero inclemente y re… avanzamos a pobres estallidos a opacos y alunados madrugones a otoños inhibidos por un cielo gr… a veces penetramos sin querer en l…
Es tan fácil nacer en sitios que n… y sin embargo fueron brumosos y re… por ejemplo m¡sitio mi marmita de… mi suelta de palomas conservaba una niebla capaz de confundir las…
La manzana es un manzano y el manzano es un vitral el vitral es un ensueño y el ensueño un ojalá ojalá siembra futuro
Tuve un largo poema que aunque se prodigaba en sus mal… al poco tiempo se quedó sin rojo tuve otro con jazmines frágiles hogareños e insondables
El marciano llegó en una nave reducida, casi portátil, algo así como un Volkswagen del espacio. Además de su propia lengua, sólo hablaba inglés, pero no el de la BBC sino el de Shakespe...
Soñamos juntos juntos despertamos el tiempo mientras tanto hace o deshace
Porque te tengo y no porque te pienso porque la noche está de ojos abier… porque la noche pasa y digo amor porque has venido a recoger tu ima…
Sólo hasta ayer fui joven hoy empecé a ser viejo desde el mal bienestar
No te quedes inmóvil al borde del camino no congeles el júbilo no te salves ahora ni nunca
Con su ritual de acero sus grandes chimeneas sus sabios clandestinos su canto de sirenas sus cielos de neón