#SigloXX #SigloXXI #Uruguayos #1988 #VientosDelExilio
Esta vez fue un cometa que sacudió… y creemos saberlo todo de esa inca… ¿y si otra vez / dentro de tres mi… o de un lustro o de una sola noche otro cometa nos eligiera para acri…
Falta saber el último sentido, quiero decir: si es pueblo o es im… Cada noticia con su desmentido, cada desolación con su misterio. Claro, cuando el misterio es de me…
La rosa de oro no se marchita ni tiene aroma el cielo ajeno que te envenena
En la sala repleta circuló un aire helado cuando don Luciano, con todo el peso de su prestigio y de su insobornable capacidad de juicio, al promediar su conferencia tomó aliento para de...
Por segundo año consecutivo, los Williams y los Peabody se encontraban en el agosto de Puerto Pollensa. Como tantos ingleses, franceses, escandinavos, se sentían atraídos por la relativ...
Todos sabemos que nada ni nadie ha… sin embargo hay que vivir como si… sabemos que los caballos y los per… pero no es descartable que en una… sabemos que en una esquina no rosa…
De vez en cuando hay que hacer una pausa contemplarse a sí mismo sin la fruición cotidiana examinar el pasado
El primero de enero de mil novecientos sesenta y nueve la señora de lot gusana del vedado no resiste el consuelo de la tenta…
Todos caminan yo también camino es lunes y venimos con la saliva a… mejor dicho son ellos los que vienen
A la muerte a la muerte a la muert… no importa que el verano nos ataje que las piedras incrédulas nos mir… los sordomudos del amor los milita… de la felicidad nos exorcicen
Porqué viene el recuerdo éste y no otro si nadie nada nunca lo llama lo repite lo convoca si miro claraboyas nubes techos
Enhorabuena como quien dice barrio y universo o etrusco y habanero u optimismos en rústica que saben el color de sus razones
Pensó ojalá que no pero esta vez acaso sea la última. Con el deseo más tierno que otras… tentó las piernas de la mujer nuev…
Viajo como los nómadas pero con una diferencia carezco totalmente de vocación viajera sé que el mundo es espléndido
Para no sucumbir ante la tentanción del precipicio el mejor tratamiento es el fornicio