A Ernesto Sabato
#SigloXX #SigloXXI #Uruguayos #1995 #ElAmorLasMujeresYLaVida #ElOlvidoEstáLlenoDeMemoria
La rosa de oro no se marchita ni tiene aroma el cielo ajeno que te envenena
Como en tantas y tantas de sus pesadillas, empezó a huir, despavorido. Las botas de sus perseguidores sonaban y resonaban sobre las hojas secas. Las omnipotentes zancadas se acercaban a...
La inagotable sangre que se vierte… los crímenes que amueblan las mejo… los parricidios los incestos los t… las erinneas las moiras ilustran las rabietas celestiales
Anoche cuando supe que Ayrton Sen… se había inmolado en el circuito i… me invadió una lástima polvorienta una tristeza residual nunca sentí admiración por la fórm…
A veces el silencio convoca algarabías parodias de coraje espejismos de duende tangos a contrapelo
Los sueños de la siesta no son los mismos que los de la no… sueño en la noche a veces con tapias / hondonadas las embestidas del pampero
El olvido no es victoria sobre el mal ni sobre nada y si es la forma velada de burlarse de la historia para eso está la memoria
La muerte es siempre una sorpresa… aunque uno comparezca con las bisagras herrumbrosas la gracia pasa pasan las desgracia… las promesas a veces se corrompen
Mi amigo que es un poeta convocó a los poetas. Hay que escribir un poema sobre la bomba atómica
Es preciso ponernos brevemente de… aquí el buitre es un aura tiñosa y… las olas humedecen los pies de las… y hay mulatas en todos los puntos… los autos van dejando tuercas en e…
Una ensenada sólo vista en postale… una región perpleja del recuerdo una fruta escasísima y sabrosa un suburbio que ya no se frecuenta una paloma absorta en los pretiles
La calumnia como hiroshima de bols… el desierto como adversario unánim… el silencio como razón de estado la hipocresía como recoveco de la… el desamor como metáfora de fuego
Cierto, me rodean árboles un tanto… se asoman al paisaje como buscándo… mas yo también me busco y he olvid… desesperadamente mis labios. Vuelvo recién del último silencio
Cierro los ojos para disuadirme. Ahora no es, no puede ser la muert… Está el escarabajo a tropezones, mi sed de ti, la baja tarde inmóvi… De veras está todo como antes:
La piel acariciada se acabó se acabaron las manos que encendía… los pulmones que juzgaban el aire… piernas que enseñaban el camino se acabó el cuerpo penetrando en e…