Una semana
Dolió más que tres años,
algo fugaz se asomó,
me cautivó sin reparos,
y mi cordura nubló.
Le preguntaba al futuro,
si mis lágrimas soportarán,
ese dolor tan oscuro,
de un amor que no será.
Amar y no ser amada,
he estado tan acostumbrada,
tal vez no es tiempo, pensé,
no hay tiempo para querer.
Tan intensamente y en vano,
tan estúpidamente, ¿quién lo sabe?
Supongo que es el precio,
de tanto amor guardado en mi llave.