#Argentinos #Mujeres
Tienes algo de montaña... A tu lado me he sentido leve y me… Sin reparo te he mostrado mis llag… y a tu cumbre nevada a veces traje… y hecha pedazos mi alma.
El mar soñó en voz alta que tú me besarías. Libérame un instante los labios, necesito contarte sobre el filo
Salvaje como el viento, y arisca, y triste a veces como un rezo a la muerte, y otras veces dichosa, y transpare… y otras veces turbia
Desde mi ángulo diurno de cordura, no recordaba cómo, llegué flecha, a disparar del arco… Fue la herida de penetrar la noche… que me llamó a encontrarme.
Yo no tengo la culpa de amar tenaz la sombra de las cos… y sentir la impaciencia del mister… y vibrar la certeza de la luz que… Yo no tengo la culpa de quedarme c…
Linfa Espuma Coral y Remolino No hay un paso de mí, que no sea c…
Te esperé hasta recién; estás de fiesta. Mi casi otoño no me deja ambular tu primavera.
Yo he de sentir en mi escollera el miedo, golpear por mis costados, cuando partas. Levantarás el ancla
Mínimamente y esencial, quería su hora de amor. Como Dios la suya de creación, como Luzbel la suya de maldad.
Hay arena y hay mar, y un horizont… que podría tocarse con las manos. Un instante canícula, vacío, pescadores tan solo
Quiero huir de tu lástima, y tropi… con mis zarzas de miedo y con mi nido de alegrías dormidas, y desgarro. Has tendido
Me dieron un puñado de rosas a la hora del ánfora en la comba rupestre de… y debo hacer un hombre con él, y no se cómo.
Tú quieres que no sea, pero cómo...? Tú podrás acaso devolverme a mis noches azules y a mi anhelo,
Espiga, racimo mis trigos maduran, fermenta mi vino. La tierra se comba, mi piel, pergamino
Y la lluvia sonríe, canta dentro del cristal que me habita y repercute sobre un suelo ya antiguo en otras lluvias, y otras tardes m…