RIOS DE VACACION
Regresé con gloria
a los vientos azules del preciado río.
Hubo días en que la risa floreada
bordeaba mi porto,
hubo días en los que la lluvia
recorrió nuestros cuerpos
y luego nos sentamos
a beber una infusión caliente.
Estuve de gira
pisando los talones del pasado
y también sobreviví de ahogarme en un sueño.
Me varé en la ciudad,
siempre con diversión de vacaciones.
Descubrí las viejas mantas que me cobijaban,
también las nuevas que alimentarían mi hambriento futuro.
Tuve mi tiempo propio para divagar en paz
y crear un nuevo y naciente horario,
agujas y días inexactos para embriagar los ojos de mis árboles,
oportunidad para aprender lo que quieran enseñarme.
Un estupendo regreso
luego de haber zambullido mi cráneo,
casi dos años, en puro cemento.
El último día.
El que necesitaba para reflexiones que me dictan,
una vez más, los dulces ríos.
Maximiliano Espósito (DERECHOS RESERVADOS)
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