#Colombianos #Mujeres #SigloXX (1951) Secreta isla
Asomado a la fuente ve que el agua… con el trémulo asombro de su propi… Los ojos ya no pueden rescatar la… que ha olvidado en las redes hiali… Nunca nadie en la tierra
Se me perdió tu huella. Un viento huracanado y frío la borró del sen… dejándome los pasos sin rumbo alguno ahora,
No es de ahora este amor. No es en nosotros donde empieza a sentirse enamorado este amor por amor, que nada esper… Este vago misterio que nos vuelve
A la muerte, en Venecia, la llevan a pasear como a una novia. Por entre dos azules la góndola luctuosa
Las hebras de un tapiz imaginario fueron nuestros destinos que un in… se rozaron apenas en la cruz del encuentro. De norte a sur tu paso, de este
De aquel amor que nunca fuera mío y sin embargo se tomó mi vida, me queda esta nostalgia repetida sin fin, cuando sollozo y cuando r… A veces, desde el fondo del estío,
Cuando llegué te habías ido del brazo de otro amor. Y no quise decirte: «Vuelve, perdóname esta vez, se me hizo tarde,
No sé nada de ti. De mí no sabes nada. Sólo que al encontrarse nuestros ojos un día,
Porque nació frente al alba y en el sitio de la brisa, le dieron un nombre claro de flor o de lluvia fina. Un nombre para decirlo
Vuelvo a tenerte, amor, como si nunca te me hubieras ido. Tus manos me recorren el rostro suavemente,
Ha de pasar la vida. Ha de llegar… He de quedar tendida bajo la tierr… insensible, callada, como estatua… que al romperse en pedazos abandon… Ya sin brillo los ojos que te sigu…
Mar de mi infancia. Caracolas, arena de oro, velas blancas. Si alguien cantaba entre la noche a las sirenas recordaba. Simbad venía en cada ola
Pienso en ti. La tarde, no es una tarde más; es el recuerdo de aquella otra, azul,
Este día con aire de paloma será después recuerdo. Me llenaré de él como de vino un ánfora, para beberlo a sorbos cuando quier…
Esta es, amor, la rosa que me dist… el día en que los dioses nos habla… Las palabras ardieron y callaron. La rosa a la ceniza se resiste. Todavía las horas me reviste