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Invierno

I
 
Han llegado de nuevo
están aquí
Son los falsos profetas
que parten el pan de las alianzas corroídas
piedra erigida por sobre todas las lenguas
por sobre todas las formas
siete los lirios
y lucen su atuendo
profundo ajuar
de las murallas
sufre la flor mayor de los jardines
se marchita
amarillenta
Ya están formadas
las cornetas
todo el arsenal de alas
de los hombres crines
y una crueldad que muda
ese dios todopoderoso
ha recibido su ofrenda
sufre la flor mayor de los jardines
se marchita
amarillenta
Los libros
muy lejos los estantes
pero alguien se acerca
“no quiero los juegos extranjeros...
quiero el horror de la estirpe
un piano rayado
esa progresión melódica
que aprueba en silencio
todas mis voces...”
sufre la flor mayor de los jardines
se marchita
amarillenta
Un imán para todos los dardos
el perchero de uno a uno
aullidos de mujeres deshabitadas
de hombres tan sin paraguas
algo sobrevive herido
algo tomará su tren de peregrinaje
sufre la flor mayor de los jardines
se marchita
amarillenta
Tres estrellas alineadas
se mecen sobre una cuna
son los hilos tímidos
de una historia que
cansa
y se repite
avanzan los monólogos
sin sol
victoriosas la ceguera y la intolerancia
fíjate bien
–el árbol sigue erguido
porque trenzó manos en la tierra
porque nunca profirió contra los truenos
porque calla ante las alabanzas
fíjate bien
–el agua nunca decidió su cauce
jamás negó su cuerpo húmedo a las fauces
por feroces que estas fueran
aunque lo quiso nunca pudo perder la forma
fíjate bien
–ese muro y esa piedra
siguen ahí calcinados
contra todas las vicisitudes del hombre
contra todas la fuerzas de la naturaleza
El mundo calla
la razón se ha marchado tirando la puerta
y todas las premoniciones
hacen ronda en el coro de mediocres
Huye a tus residencias
alerta sus cerrojos
diles no a tus manos
amarra el corazón a una piedra
deja quieta la cesta de manzanas
sufre la flor mayor de los jardines
se marchita
amarillenta
 
II
 
criarán larvas para mi descendencia
los días
de ensayos y pericias
vendrán
–gestos para exhibirnos -
y la hoguera pondrá signos sobre nuestras cabezas
no te confundas
no vale más nuestro destino
es sólo una forma entera de asistir al paraíso
desbarata los frutos
alza las estradas del sándalo
canta la huella en tu estirpe
engalana tus plumas
y vete
donde confluyen todas las cosas
alguien probará tu sal
y habrá pan y comunión en las flores
los templos
nidos
de manos deformes
la ansiedad desayunando en mí todos los días
¿Por qué hurgas las rutas de mis brazos?
sumatoria de tonos
sumatoria de frases
una arquitectura de sonidos
hace mella en mi cabeza
van las vocales en andadera
mi palabra
es sólo un juego
equivocado
 
III
 
El mundo de los tontos
está intacto
la muerte se marchó
con su traje de pez congelado
César, los puentes
César, el cable eléctrico
César, el teléfono
la geometría se ha mudado a otro barrio
largas colas tras una banda sosa
la colección de bigotes de todos los villanos
asisten rigurosos a sus fábricas a sus clases
y usan peinetas en los calcetines
no sea que el viento...
Todos han gritado:
¡Despiértalos!
Todos quieren celebrar tu llanto belleza
La ironía
circula de cuatro a seis
como una carreta de supermercado
es un 12 de marzo
y la Verdad es terrible
¡Cuánto sueño!
“Jane, arregla tu blusa
todos los locos
han llegado al baile”.
 
IV
 
Cuando el holocausto termina
y las semillas son precisas
Como enterrar a los muertos
Cuando la luz cae de frente
y se avecina el destino preguntando
ellos
se marcharán con sus cajas destempladas
Los colores de una especie por otra
amuletos hirvientes de excrementos
el anhelo atrapado a la deriva
golpes de pecho
lenguas que traicionan
todo el léxico del arrepentimiento
y una foto semejante al rolls royce
que se avecina en mi alacena
arrepentidos
unos marchan a las calderas del odio
necios fingen saber de caleidoscopios
mortificando a las acuarelas y las mariposas
todo es negro en sus manos
todo un abuso en su boca
una mancha de sangre se agita
y promete despertar pronto
en nuestras casas
en esos campos deambula una esperanza
nítida
como la blanca comunión de los niños
pero también han llegado los buitres
carroña,
días febriles
mutis largo en los muertos
un huracán advierte su presencia
esconde mi piedra bajo el brazo
el día de los exterminios
está cerca
sobre un tiesto solar
las hormigas han despedazado la memoria
dulce materia
de la que no conocen señales
miles abren heridas en los cartones
sujetan a la verdad en una esquina
y la doblan primorosa en cuatro partes
un insomnio descomunal
advierte
un llanto en las vitrinas
pajaritas de papel que sueñan en cuatro patas
ya no hay tréboles ni hojas
y el silencio hace entregas diarias de vacío
remitente: unión
una aldea mugre de escepticismo
las abejas crecen en los muros
y dos pájaros han saltado de un edificio
caos es el nombre de este sitio
donde la cabeza de la normalidad despierta
sobre la angustia de un camino
que nunca regresa a nosotros mismos
han fustigado el cariño
y la deuda es impagable
¡Pecho a tierra
Ladies and Gentleman!

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