#Chilenos #Mujeres #SigloXX
Son apenas dos piedras. Nada más que dos piedras sin inscr… recogidas un día para ser sólo pie… Aun menos que reliquias, que testi… Rodaron hasta mí desde las dos ver…
Desde el fondo del alma me sube un sabor de pitanga a los labios. Tiene aún mi epidermis morena no sé qué fragancias de trigo empa… ¡Ay, quisiera llevarte conmigo
Fieros tenía sus ojos y ronca y mansa la voz; finas imaginaciones y plebeyo el corazón. Su madre, como sencilla,
Se descolgó el silencio, sus atroces membranas desplegadas… murciélago anterior al diluvio, su canto como el cuervo de la nega… Tu boca ya no acierta su alimento.
Desde el fondo de ti, y arrodillad… un niño triste, como yo, nos mira. Por esa vida que arderá en sus ven… tendrían que amarrarse nuestras vi… Por esas manos, hijas de tus manos…
No es en este volcán que hay debaj… donde te busco, ni es esta espuma azul que hierve… cabeza, sino en esas regiones que cambian…
Me encojo en mi guarida; me atrinc… bienes. Yo, que aspiraba a ser arrebatada… huracán de fuego antes de convertirme en un bostezo…
...Más que en la voz del agua que… yo vi más campo, yo leí mas campo en el libro salvaje de tu cara. Cara para aprender a oler la loma, cuando el tabaco de tus ojos arde
1-Este es Maestro, el punto exacto de aquel vórtice herido, no olvido un solo detalle de ese dédalo inextricable, conservo aun la sangre seca entre los dedos y el amargo sabor de aquel ...
Yo venía rosada de fresca adolesce… por la campiña verde, bajo el azul… Yo venía cantando mi sana floresce… con el cristal sonoro de mi cándid… Yo venía rosada. Yo venía fragant…
El tribunal es alto, final y sin f… Sensible a las variaciones del aza… registra cada trazo que se inscrib… (del destino. De un margen de la noche a otro co…
Aún conservas intacta, memoriosa, la marca de un antiguo sacramento… tu sello de elegida, tu plenilunio… la negra sal del negro escarabajo… y que llevas, sin duda, de peregri…
Más borroso que un velo tramado po… confuso como un fardo, errante como un médano indeciso en… sin rasgos, sin consistencia, sin… así era tu porvenir visto desde la…
Lejos, de corazón en corazón, más allá de la copa de niebla que… del vértigo, siento el redoble con que me convo…
Me veo aún, asegura de la mano de… liviana, livianísima, como sobrevo… Me perseguía un viento negro de cu… Volaban por el aire mis camelias d… Y con horrible estruendo se abrier…