Alabanza
El sabor de la ira, hace hervir la sangre, incita a maldades, calienta noche y día. El sabor de la ira,
¿Por qué hombre o mujer, te aferras al desdén? ¿Por qué amas desventura, negando a tierna fortuna? Ya terminaste a Gomorra,
Antes feliz en tu presencia, corazón contrito lloraba, en amor eterno gozaba, sin ver alguna decadencia. Ahora existo sin vivir,
¡Malamente pensaba!, realmente confundido, descanso en ningún lado hallaba, pero allá oscurecido tu fuego estaba;
Divino maestro, que aprenda de las… santas; fuertes trabajadores de tu… son cesar en flores te buscan ardu… y polinizando, extienden tu palabr… Divino maestro, que aprenda de las…
Divino maestro: agrieta mi vida y supere el límite, conóceme todo, tenme en tus manos,
1. La ironía del fuego, pesar de aquella sufrida niñez, consumida en el ego, hecatombe e idiotez, antítesis de libre sencillez.
El invierno me acogió, miserable a como soy, me detesto y aborrezco porque nada me merezco; mucho menos ser feliz,
El secreto de la vida está en el simple amor, el cuidado del cuerpo, guardando el corazón. También está en la lectura,
1. El amargo pecado que apartó a Eva nuestra madre, aquí el mal encarnado viviendo en lo amargo, heredado también por nuestro padre…
A medias te quería, nada yo abrazaba, amor real negaba ¡tanto miedo tenía! Mira el ser humano
Cuando aceptes Su Voluntad, no la tuya y menos mía, ni la de papá o mamá; algo en ti cambiará, y aquel firme malestar,
Hoy me puse caprichoso, entendí qué es el ritmo: a los versos da buen tino, a mí me hace dichoso y al ego orgulloso.
¿Cómo expando tu reino a mi hermano el pobre, que todo ha perdido y de ti se ha ofendido? Si tu me has consentido
Diversas las maneras, cualquiera sea tu caso, en dar gloria sin igual, sea sentado o caminando, en el templo o en el campo,