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Wasabi

Alimento a siete perros
cuatro viven en la casa
no es mi casa, vivo en la casa de alguien más
yo también me he preguntado
por qué
por qué me han dejado que llene su casa de perros
pero pasó sin querer o queriendo pero sin pensarlo
esterilicé a tres hembras
necesitaban cuidados
después de darles cama comida y atención
dos de ellas no volvieron a irse
la tercera se fue como los hijos rebeldes que salen de casa
y a los pocos meses volvió enferma, coja y flaca
un día entró y tampoco volvió a salir
durmió por varios días seguidos
se levantaba solo para comer y salir a hacer del baño
la veía echada en su cama
echada tomando  el sol
echada siempre y solo me miraba
con sus ojos  grandes, negros  y volvía a lo suyo
suspiraba y a descansar
el cuarto perro llegó después de unos meses
un macho
era de la manada de las otras dos
había dos machos en esa manada cuando  los conocí
al otro lo mataron entre varios
un día que las perras entraron en celo
él se quedó solo por algún tiempo
cuando las hembras salían de casa
para ir al baño
en las noches también iban a verlo
yo los espiaba desde la esquina de la casa
se iban juntos al campo
donde los conocí
donde yo solía caminar todas las mañanas
después de treinta o cuarenta minutos volvían
a veces los tres a veces dos
él se quedaba en la esquina
y ella regresaba a casa corriendo
como si temiera que un día la puerta
no fuera a abrirse más
un día sin llamarlo como lo hacía a veces
Wasabi apareció en la puerta
temeroso
de que otros machos que lideran esa cuadra
fueran a echarlo a mordiscos y riatas
estaba flaco y lastimado
con los días fue sanando
no he podido llevarlo al veterinario
nadie puede acercarse a él
le tiene miedo
a veces pensaba que a todo
pero solo le teme a la gente
ha pasado ya bastante tiempo desde que llegó
y todavía hoy
me acercó y él se aleja corriendo
algún día, le digo
algún día vas a querer que te abrace
mueve la cola y me mira expectante
solo piensa en correr si me acerco demasiado
se mantiene todo el día dentro de la casa
los otros tres perros que vienen a comer
mataron al alfa de su manada
Wasabi les teme y les huye
pero poco a poco
ha ganado peso y se ha hecho más fuerte
ha recuperado confianza en él
y aunque les sigue temiendo
ahora al menos se defiende
cuando ve a los otros y está en la calle
se planta en la puerta
como una estatua de hierro
ladra fuerte y los ahuyenta
a veces con la ayuda de las otras
a veces él solo
y a veces prefiere rascar la puerta
y entrar.
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