#EscritoresAndaluces #EscritoresEspañoles #JRJCanción 1936
¡Ojos que quieren mirar alegres y miran tristes! ¡Ay, no es posible que un muro viejo
¡Hoja verde con sol rico, carne mía con mi espíritu!
La puerta está abierta, el grillo cantando. ¿Andas tú desnuda por el campo? Como un agua eterna,
Qué trasparente amor, en la cálida tarde tranquila, el del azul y yo. Mi pena viene y va. Mas la mira una estrella suave
Siempre yo penetrándote, pero tú siempre virjen, sombra; como aquel día en que primero vine llamando a tu secreto,
Hoy no se puede salir, Platero. Acabo de leer en la plazoleta de los Escribanos el bando del alcalde: «Todo Can que transite por los andantes de esta Noble Ciudad de Moguer, sin su corr...
Suele creerse que yo escribí “Platero y yo” para los niños, que es un libro para niños. No. En, “La Lectura”, que sabía que yo estaba con ese libro, me pidió que adelantase un conjunto ...
Abril venía, lleno todo de flores amarillas: amarillo el arroyo, amarillo el vallado, la colina, el cementerio de los niños,
¡Qué tranquilidad violeta por el sendero a la tarde! A caballo va el poeta... ¡Qué tranquilidad violeta! La dulce brisa del río,
Días negros cual los días de parada indiferencia de dios antecreador. (Todo duro, entero todo, en mole de un orden negro,
Sólo lo hiciste un momento. Mas quedaste, como en piedra, haciéndolo para siempre.
Tú no lo conociste. Se lo llevaron antes de que tú vinieras. De él aprendí la nobleza. Como ves, la tabla con su nombre sigue sobre el pesebre que fue suyo, en el que están su silla, su...
Como médanos de oro, que vienen y que van en el mar de la luz, son los recuerdos. El viento se los lleva,
Entrando por la calle de la Fuente, de vuelta del huerto, las campanas, que ya habíamos oído tres veces desde los Arroyos, conmueven, con su pregonera coronación de bronce, el blanco pu...
Nos la encontramos mi hermano y yo volviendo, un mediodía, del colegio por la callejilla. Era en agosto—¡aquel cielo azul Prusia, negro casi, Platero!—y para que no pasáramos tanto calo...