¿Qué me copiaste en ti, que cuando falta en mí la imajen de la cima, corro a mirarme en ti?

¡Qué tranquilidad violeta por el sendero a la tarde! A caballo va el poeta... ¡Qué tranquilidad violeta! La dulce brisa del río,

Andando, andando. Que quiero oír cada grano de la arena que voy pisando. Andando. Dejad atrás los caballos,

La tarde será un sueño de colores.… Tu fantástica risa de oro y plata derramará en la gracia de las flor… su leve y cristalina catarata. Tu cuerpo, ya sin mis amantes huel…

No recuerdo... (Ya no viene el cavador que cavaba en el venero) No recuerdo... (Sobre la mina han caído

Yo sé que cuando me vaya con el alma he de volver a esta tierra en que hoy espero. Que no quiero con el alma —porque el alma está en su sitio—,

Cierra, cierra la puerta, como a ella le gustaba... ¡Que se encuentre a su gusto su recuerdo!

Verde brillor sobre el oscuro verd… Nido profundo de hojas y rumor, donde el pájaro late, el agua vive… y el hombre y la mujer callan, tap… (el áureo centro abierto en torno

Encontré a Platero echado en su cama de paja, blandos los ojos y tristes. Fui a él, lo acaricié hablándole, y quise que se levantara... El pobre se removió todo bruscamente, y dejó una ...

La media puesta de sol tiñe con su grana de oro mi otro medio corazón.

Está el cielo tan bello, que parece la tierra. (Dan ganas de volver los pies y la cabeza.)

Estoy triste, y mis ojos no lloran y no quiero los besos de nadie; mi mirada serena se pierde en el fondo callado del parque. ¿Para qué he de soñar en amores

¡Qué lejos, azul, el cielo, de la tierra pobre! Pero los dos son el día bueno.

Sí, esta tarde no es imajen, las nubes son rosas, sí, las rosas son vida, sí. Esta tarde tú eres tú, no es nube el amor en mí,