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Por las arboledas del Tamarit han venido los perros de plomo a esperar que se caigan los ramos, a esperar que se quiebren ellos so… El Tamarit tiene un manzano
Viento del Este; un farol y el puñal en el corazón. La calle
A las cinco de la tarde. Eran las cinco en punto de la tard… Un niño trajo la blanca sábana a las cinco de la tarde. Una espuerta de cal ya prevenida
La Tarara, sí; la tarara, no; la Tarara, niña, que la he visto yo. Lleva la Tarara
Tierra seca, tierra quieta de noches inmensas. (Viento en el olivar,
En la noche del huerto, seis gitanas, vestidas de blanco bailan. En la noche del huerto,
Yo tenía un hijo que se llamaba J… Yo tenía un hijo. Se perdió por los arcos un viernes… Le vi jugar en las últimas escaler… y echaba un cubito de hojalata en…
La luna asoma Cuando sale la luna se pierden las campanas y aparecen las sendas impenetrables.
Equivocar el camino es llegar a la nieve y llegar a la nieve es pacer durante veinte siglos las… Equivocar el camino
Niño. ¡Que te vas a caer al río! En lo hondo hay una rosa y en la rosa hay otro río. ¡Mira aquel pájaro! ¡Mira
Mamá, yo quiero ser de plata. Hijo, tendrás mucho frío. Mamá.
Mi corazón oprimido Siente junto a la alborada El dolor de sus amores Y el sueño de las distancias. La luz de la aurora lleva
Naranja y limón. ¡Ay de la niña del mal amor! Limón y naranja. ¡Ay de la niña,
Laoconte salvaje. ¡Qué bien estás bajo la media luna! Múltiple pelotari. ¡Qué bien estás
Voces de muerte sonaron cerca del Guadalquivir. Voces antiguas que cercan voz de clavel varonil. Les clavó sobre las botas