#1995 #ElAmorLasMujeresYLaVida #EscritoresUruguayos #NociónDePatria
Cuando sólo era un niño estupefacto viví durante años allá en colón en un casi tugurio
El ruiseñor conoció a la ruiseñora en un bar de alterne donde ella cantaba noche a noche viejos tango… él la llevó a su casa y le cantó d… desde lieder de schumann hasta ari…
Cuando esta virgen era prostituta soñaba con casarse y zurcir calcet… pero desde que quiso ser simplemente virgen y consiguió rutinas y marido
Por lo menos habían transcurrido quince años sin que Ignacio supiera nada de Martín o de Alfonso. Nada, de modo directo, claro, ya que indirectamente le habían llegado esporádicas refer...
Llegaron a Salidas Internacionales de Barajas con el tiempo justo, de modo que tuvieron que situarse de inmediato en la cola de Iberia, vuelo 987 a Buenos Aires. Ninguno de los tres hab...
Cuando mi padre se arruinó con la farmacia de Tacuarembó, la familia pasó, casi sin transición, de la vida confortable a la casi miseria. Fuimos a dar a una casucha con techo de zinc en...
Tengo miedo de verte necesidad de verte esperanza de verte desazones de verte tengo ganas de hallarte
Palpen la espiga el cáliz el estam… la huella dibujada por la tierra busquen el cuerpo amado entre los… el que no es miren en qué baldosa de la histori…
Hay que ir acostumbrándose de a po… la jornada es tan plena tan bien f… que nadie se anima a partirla en d… las cábalas se ocultan tras las co… los pésames se van chapoteando ent…
Desde que, en mi lejana adolescencia, me enfrenté a El amor, las mujeres y la muerte, por entonces el libro más popular del filósofo alemán Arthur Schopenhauer (1788-1860), entré en con...
Cierro los ojos y no existe el prójimo se terminan la lucha
Los verdugos suelen ser católicos creen en la santísima trinidad y martirizan al prójimo como un me… de combatir el anticristo pero cuando mueren no van al cielo
No cabe duda. Ésta es mi casa aquí sucedo, aquí me engaño inmensamente. Ésta es mi casa detenida en el tie… Llega el otoño y me defiende,
La noche es inhumana. Nadie sabe cómo se cierra esa ventana oscura si no lo hace con su propia llave, replegado en su sombra y sin usura… con la memoria más que nunca alert…
A sus treinta y cinco años, Ileana Márquez tenía marido (Dámaso) y amante (Marcos). Saberse querida, o al menos deseada por ambos, no le causaba la menor ansiedad, más bien le otorgaba ...