#EscritoresMexicanos
¡Parece mentira que hayas existido… Te veo tan lejos... Tu mirada, tu voz, tu sonrisa, me llegan al fondo de un pasado in… Eras más sutil
¡Hasta sus perfumes duran más que… Ved aquí los frascos, que apenas u… y que reconstruyen para mí la huel… sutíl que en la casa dejó... Herméticamente encerrada,
Pasó con su madre. ¡Qué rara bell… ¡Qué rubios cabellos de trigo garz… ¡Qué ritmo en el paso! ¡Qué innat… de porte! ¡Qué formas bajo el fino… Pasó con su madre. Volvió la cabe…
Muy cerca de mi ocaso, yo te bendi… porque nunca me diste ni esperanza… ni trabajos injustos, ni pena inme… porque veo al final de mi rudo cam… que yo fui el arquitecto de mi pro…
Atiborrado de filosofía, por culpa del afán que me devora, yo, que ya me sabía dos gramos del vivir, nada sé ahor… De tanto preguntar
¿Y por qué no ha de ser verdad el… ¿Qué trabajo le cuesta al Dios qu… el tul fosfóreo de las nebulosas y que traza las tenues pinceladas de luz de los cometas incansables
Como verte es el único ideal que p… sin vivir en mí estoy, y muriendo del ansia de reunirme c… cada día me digo: “¡Si pudiera ser hoy!”
¡La muerte! Allí se agota todo es… allí sucumbe toda voluntad. ¡La Muerte! ¡Lo que ayer fue nues… hoy sólo es nuestra Nada!... ¡Ete… ¡Silencio!... El máximo silencio
El día que me quieras tendrá más l… la noche que me quieras será de pl… con notas de Beethoven vibrando en… sus inefables cosas, y habrá juntas más rosas
Yo canto al cielo porque mis linfa… hacen que fructifiquen las savias;… los sotos y las lomas por mí tiene… Nadie me mira, nadie; más mi corri… se regocija luego que viene primav…
Cuando lloro con todos los que llo… cuando ayudo a los tristes con su… cuando parto mi pan con los que im… eres tú quien me inspira, sólo tú, Cuando marcho sin brújula ni tino,
¡No porque está callada y ya no te responde, la motejes; no porque yace helada, severa, inmóvil, rígida, la huyas; no porque está tendida
Para calmar a veces un poco el sob… el invencible anhelo de volverte a… me imagino que viajas por un país… de donde es muy difícil, ¡muy difí… Así mi desconsuelo, tan hondo, se…
Bien sé, devota mujer, cuando te contemplo en tus fervores y celo arder, que no me puedes querer como quieres a Jesús.
Bien ves, si me estás mirando, que desde que te perdí, mi vida se va pasando piadosamente pensando en ti;