(1936)
#EscritoresMexicanos
Los días se van el pobre Calendario se siente adelgazar de modo extraordinario. Sus hojas de papel
Un chinito estampado en un gran ja… fue acusado de decir: “¡Yan-tse-amo-oua-ting-i-pong-chon… El chinito no quería ya vivir en el jarrón,
Óyeme, mamacita, a que no te imaginas, a que no me adivinas, lo que tu indito te trae aquí. Son nada más dos cosas:
La casa blanca de techo rojo, un árbol verde, el cielo azul y remolinos color de ocre con los que juega el viento sur. Bajo la sombra, dulces violetas;
Di por qué, dime, abuelita, di por qué eres viejita. Di por qué
Afuera de su cabaña, ya casi al amanecer, una negrita pequeña tenía el capricho de ver, de ver brillar en el cielo
Van los novios en camino a la iglesia del lugar: son dos blancas palomitas que se van a casar. La paloma es preciosa
Don Perfidio Malaentraña, hechicero de postín, como los de su calaña es malvado, bajo y ruin. En las sombras de la noche,
Con su garrote, con su morral, viene un conejo por el trigal. Animalejo, ven hacia acá, ¡hola, conejo! ¿cómo te va? Conejito, ¿Cómo te llamas
El burrito está llorando... ¿Qué le pasa? ¿Qué le duele? ¡Si será que va a enfermar! El burrito está llorando... ¡Pobrecito! En la escuela
En la ratonera ha caído un ratón, con sus dos pistolas y su traje de… ha de ser gringuito porque siempre… a más de ser güerito y tener grand… El ratón vaquero saco sus pistolas
El comal le dijo a la olla: “Oye olla, oye, oye, si te has creído que yo soy recarg… ¡búscate a otro que te apoye!”.
Salta que te salta por el bosque, iba Doña Ardilla con una sombrilla azul, entre la fragancia de los pinos y el perfume de eucaliptos y abedu…
Hay un castillo en las nubes, ¡te juro!, de belleza tal que nunca igual pudo haber más puro.
Metida en su casita con su gorra y… estaba Doña Zorra ocupada en reme… pero su teléfono no deja de llamar… y corre al audífono para preguntar… Riiing Riiing