#EscritoresChilenos
Yo pregunto a los presentes si no se han puesto a pensar que esta tierra es de nosotros y no del que tenga más. Yo pregunto si en la tierra
Voy a hacerme un cigarrito acaso tengo tabaco si no tengo de’onde saco lo más cierto es que no pito. Ay, ay, ay, me querís,
En mis pagos hay un árbol, que del olvido se llama, al que van a despenarse, vidalitay… los moribundos del alma. Para no pensar en vos,
Estaba la beata un día enferma del mar de amor el que tenía la culpa, era el fraile confesor. Chiribiribiribiri,
Qué sabes de cordillera, Si tú naciste tan lejos Hay que conocer la piedra Que corona al ventisquero; Hay que recorrer callando
Arrímese mas pa’ ca aquí donde el sol calienta, si uste’ ya está acostumbrado a andar dando volteretas y ningún daño le hará
Los estudiantes chilenos y latinoamericanos se tomaron de las manos matatiretirundín. En este hermoso jardín
En el valle de Pocuno donde rebota el viento del mar donde la lluvia cría los musgos vive Angelita Huenumán. Entre el mañío y los hualles
Yo no canto por cantar ni por tener buena voz, canto porque la guitarra tiene sentido y razón. Tiene corazón de tierra
Muchacho chileno fulgor de la nueva brigada las calles del pueblo despiertan con tu claridad. Tu brocha es el canto
En el centro de la pampa vive un pimiento. Sol y viento pa’ su vida, sol y viento. Coronado por la piedra
La vida, niña de los ojos negros la vida, de los ojos colorados la vida, tus mayores son mis suegr… la vida, tus hermanos mis cuñados. Ojos negros y pardos
Donde cayó Camilo nació una cruz, pero no de madera sino de luz. Lo mataron cuando iba
Siete rejas, siete llaves, siete ríos, siete mares. Siete son los que te llevan, siete son los que te traen, siete son mis siete mares.
Las casitas del barrio alto con rejas y antejardín, una preciosa entrada de autos esperando un Peugeot. Hay rosadas, verdecitas,