#1923 #EscritoresArgentinos #FervorDeBuenosAires
El arrabal es el reflejo de nuestr… Mis pasos claudicaron cuando iban a pisar el horizonte y quedé entre las casas, cuadriculadas en manzanas
Grata la voz del agua a quien abrumaron negras arenas, grato a la mano cóncava el mármol circular de la columna, gratos los finos laberintos del ag…
El porvenir es tan irrevocable como el rígido ayer. No hay una co… que no sea una letra silenciosa de la eterna escritura indescifrab… cuyo libro es el tiempo. Quien se…
¿Dónde estarán? pregunta la elegía de quienes ya no son, como si hubi… una región en que el Ayer, pudiera ser el Hoy, el Aún, y el Todavía. ¿Dónde estará? (repito) el malevaj…
Todas las cosas tuvo y lentamante Todas la abandonaron. La hemos vi… Armada de belleza. La mañana Y el arduo mediodía le mostraron, Desde su cumbre, los hermosos rein…
No he recobrado tu cercanía, mi pa… Lo más lejano del firmamento las d… Se han desprendido de las altas co… Vienen del patio donde el aljibe e… Vienen del creciente jardín cuya i…
Defiéndeme, Señor. (El vocativo no implica a Nadie. Es sólo una p… de este ejercicio que el desgano l… y que en la tarde del temor escrib… Defiéndeme de mí. Ya lo dijeron
He cometido el peor de los pecados que un hombre puede cometer. No he… feliz. Que los glaciares del olvid… me arrastren y me pierdan, despiad… Mis padres me engendraron para el…
En busca de la tarde fui apurando en vano las calles. Ya estaban los zaguanes entorpecid… Con fino bruñimiento de caoba la tarde entera se había remansado…
Esta es una elegía de los rectos portones que alargab… en la plaza de tierra. Ésta es una elegía que se acuerda de un largo resplan…
Gentil o hebreo o simplemente un h… cuya cara en el tiempo se ha perdi… ya no rescataremos del olvido las silenciosas letras de su nombr… Supo de la clemencia lo que puede
Debo prevenir al lector que las páginas que traslado se buscarán en vano en el Libellus (1615) de Adán de Bremen, que, según se sabe, nació y murió en el siglo once. Lappenberg las hall...
He divisado, desde las páginas de… los conjuntos, la Mengenlebre, que… los vastos números que no alcanzar… agotara sus eternidades contando,… tienen como cifras las letras del…
Bajo la piedra yace el cuerpo de… Que fundó en estas islas el primer… De la estirpe de Odín Y sació el hambre de las águilas.
Entre los libros de la biblioteca había uno, escrito en lengua arábiga, que un soldado adquirió por unas monedas en el Alcana de Toledo y que los orientalistas ignoran, salvo en la vers...