#EscritoresEspañoles #Generación27
Dale al aspa, molino, hasta nevar el trigo. Dale que dale, dale que dale, dale que dale.
Sólo quien ama vuela. Pero, ¿quié… que sea como el pájaro más leve y… Hundiendo va este odio reinante to… quisiera remontarse directamente v… Amar ... Pero, ¿quién ama? Volar…
Como el toro he nacido para el lut… y el dolor, como el toro estoy mar… por un hierro infernal en el costa… y por varón en la ingle con un fru… Como el toro lo encuentra diminuto
Llueve. Los ojos se ahondan buscando tus ojos: esos dos ojos que se alejaron a la sombra cuenca adentro. Mirada con horizontes
Tu corazón, una naranja helada con un dentro sin luz de dulce mie… y una porosa vista de oro: un fuer… venturas prometiendo a la mirada. Mi corazón, una febril granada
Un albañil quería... No le faltab… Un albañil quería, piedra tras pie… tras muro, levantar una imagen al… desencadenador en el futuro. Quería un edificio capaz de lo más…
¿Qué quiere el viento de encono que baja por el barranco y violenta las ventanas mientras te visto de abrazos? Derribarnos, arrastrarnos.
Por fin trajo el verde Mayo correhuelas y albahacas a la entrada de la aldea y al umbral de las ventanas. Al verlo venir se han puesto
El corazón es agua que se acaricia y canta. El corazón es puerta que se abre y se cierra. El corazón es agua
Como la higuera joven de los barrancos eras. Y cuando yo pasaba sonabas en la sierra. Como la higuera joven,
Fuera menos penado si no fuera nardo tu tez para mi vista, nardo, cardo tu piel para mi tacto, cardo… tuera tu voz para mi oído, tuera. Tuera es tu voz para mi oído, tuer…
En tu angosto silbido está tu quid… y, cohete, te elevas y te abates; de la arena, del sol con más quila… lógica consecuencia de la vid. Por mi dicha, a mi madre, con tu a…
Dos especies de manos se enfrentan… brotan del corazón, irrumpen por l… saltan, y desembocan sobre la luz… a golpes, a zarpazos. La mano es la herramienta del alma…
Me tiraste un limón, y tan amargo, con una mano cálida, y tan pura, que no menoscabó su arquitectura y probé su amargura sin embargo. Con el golpe amarillo, de un letar…
El cementerio está cerca de donde tú y yo dormimos, entre nopales azules, pitas azules y niños que gritan vívidamente