#1947 #ElSonEntero #EscritoresCamagüeyanos #EscritoresCubanos
¿Prólogo? Sí. Prólogo... Pero nada grave, porque estas prim… verdes, como ramas jóvenes. Realmente, yo soy partidario de co… epílogos. Y en todo caso, dejar lo…
¿Imagina usted, Teresa, cómo arde su rostro grave al resplandor de la suave luz verde en sus ojos presa? ¿Se sabe qué luz es ésa?
¡Ay, señora, mi vecina, se me murió la gallina! Con su cresta colorada y el traje amarillo entero, ya no la veré ataviada,
¿Po qué te pone tan brabo, cuando te dicen negro bembón, si tiene la boca santa, negro bembóm? Bembón así como ere
¿Cuándo fue? No lo sé. Agua del recuerdo voy a navegar. Pasó una mulata de oro,
Tengo del Rin, del Ródano, del E… tengo los ojos llenos; tengo del Tíber y del Támesis, tengo del Volga, del Danubio, tengo los ojos llenos.
Paloma del palomar, cuando tú pases por México no dejes de preguntar quien me cerró la puerta a que llamo yo,
¡De qué callada manera se me adentra usted sonriendo, como si fuera la primavera! (Yo, muriendo.)
Muerto de fatiga y sueño, vuelve un soldado del monte. Labio duro, duro ceño. ¡Qué lejos el horizonte donde el hierro lo desciña
Mi patria es dulce por fuera, y muy amarga por dentro; mi patria es dulce por fuera, con su verde primavera, con su verde primavera,
Tendida en la madrugada, la firme guitarra espera: voz de profunda madera desesperada. Su clamorosa cintura,
Envenenada tinta habla de los mau-maus; negros de diente y uña, de antropofagia y tótem. Gruñe la tinta, cuento,
No me dan pena los burgueses venci… Y cuando pienso que van a darme pe… aprieto bien los dientes, y cierro… Pienso en mis largos días sin zapa… pienso en mis largos días sin somb…
Van a fusilar a un hombre que tiene los brazos a… Hay cuatro soldados para disparar. Son cuatro soldados
He leído acostado todo un blando domingo. Yo en mi lecho tranquilo, mi suave cabezal, mi cobertor bien limpio,