#Colombianos #ParaNiños #SigloXIX
Según díceres públicos doña Pánfa… O pudiera ser víctima de apoplétic… Su exorbitante estómago era el más… Fenómeno volcánico su incesante ja… Sus fámulos y adláteres la apodaba…
Ya viene la galana primavera Con su séquito de aves y de flores… Anunciando a la lívida pradera Blando engramado y música de amore… Deja ¡oh amigo! el nido acostumbra…
¿Qué instinto misterioso al hombre… Al despego y frialdad por todo aqu… Que ya conoce, y a vestir de encan… Y aun perseguir con afanosa indust… Todo lo que le es desconocido?
Vicio divino, que a groseros vicio… Me hiciste despreciar, Y las mil vanidades y artificios Del tráfico vulgar; Sacro elixir que al corazón y al a…
¡He aquí del año el más hermoso dí… Digno del paraíso!, es el temprano Saludo que el otoño nos envía ¡Son los adioses que nos da el ver… Ondas de luz purísima abrillantan
El hijo de Rana, Rinrín Renacuaj… salió esta mañana, muy tieso y muy… con pantalón corto, corbata a la m… sombrero encintado y chupa de boda… “¡Muchacho, no salgas!” le grita m…
Quiso el niño Cutufato Divertirse con un gato; Le ató piedras al pescuezo, Y riéndose el impío Desde lo alto de un cerezo
Caro juan y demás patronos míos Que un triunfo me acordáis sin que… Por azuzar los moribundos bríos De un zancarrón que está pidiendo… Creadores de la nada, por maniobra
Como Fray Luis tras de su largo e… «Decíamos ayer...» también digamos… ¿Han pasado años? En la cuenta ha… O nosotros con ellos no pasamos. Donde ayer lo dejamos, dulce dueño…
Michín dijo a su mamá: “Voy a volverme Pateta, y el que a impedirlo se meta en el acto morirá. Ya le he robado a papá
Doble es el hombre; ángel y bestia… Disputándose el cetro en lucha ing… Doble es el mundo:—espíritu y sent… Cada cual en su mundo se dilata. Doble es la vida: a todos los naci…
Bien pueden su hojarasca y polvo y… Acumular los años sobre ti. Mi corazón sacude el turbio velo, Y siempre te hallo, ¡oh dádiva del… Fresca y radiante en mí.
No ya mi corazón desasosiegan las mágicas visiones de otros días… ¡Oh Patria! ¡oh casa! ¡oh sacras… Silencio! Unas no son, otras me n… Los gajos del pomar ya no doblegan
Un campesino que en su alacena guardaba un queso de Nochebuena, oyó un ruidito ratoncillesco por los contornos de su refresco. Y pronto, pronto, como hombre list…
¡Triqui! ¡Traque! ¡Juipi! ¡Juape! ¡Arre!