(1920)
#Cubanos #SigloXIX #SigloXX
Del horizonte al cenit, y entre gu… De masas nacarinas, índigo, pru– sia, celeste. Las nubes _imitativa… todas las formas_ son: montañas, f… tas y frondas. La luz del mar se l…
Proemio Solos con nuestras cuitas en la al… frente a la blanca luna del espejo… la atraje hasta mi hombro con un m… y la retuve con la miel de un beso…
En tanto corre el tren, cercas y v… llados huyen paralelamente hacia atrás; los postes telegráficos se… nan hacia la carrilera; y la playa… a un chamizo carbonizado que parec…
Mirándote desnuda junto al lecho, como un ensueño que se hiciese vid… pongo un beso de amor –ala encendi… entre las prominencias de tu pecho… En tanto bebo la fragancia suave
La marea baja descubre _como una pradera sepia comida de cardeni– llo_ la atormentada cacharrería y… exóticos retales que el mar _el bu… chamarilero_ guarda con avaricia e…
Como chispas apagadas del volcán de tu pasión, se distienden cual regueros de aza… por lo blanco de tu cutis en carna… Maquinando una leyenda
A la puerta _estilo kolosal_ de la estación X. Y. P. de Democity, y hora Standard las 14 y 5 con sol en Géminis.
Soy un hombre natural; sigo la Naturaleza que en un mismo punto empieza lo que es Bien y lo que es Mal. Mi gesto es siempre espontáneo;
La tarde era una aurora; el sol po… incendio, entre las lindes del oca… Rojas nubes amantes a su paso le besaban con ósculo fulgente. Hacían mar y cielo un ascua ingent…
Hay en el niquelado de la peana del sillón_ espejo que embruja lo circundante_ dos ojos donde una luz blanca_ dos perlas irisadas_ se ha posado;
Mediodía. Pleamar. La gaviota se tira sobre el pez _ brillazón f… gitiva _ que navega en el verdecel… de la ola. Y el pez huye de la som… de la gaviota _ mancha fugitiva _…
Carbón y negro azul en la maleza, perla entre la maraña del celaje, y una melancólica tristeza que se efunde del alma del paisaje… El agua rueda con letal pereza;
Hay más arcano que en el beso, que en el dolor y que en la muerte… en el ojo humano del elefante. Y mientras danza torpemente y sincroniza sus orejas,
Calla, cobarde! Te repudio. Queda en el hondo cubil de tu ignorancia… sería descender de mi arrogancia herirte con mi látigo de seda. La dignidad es dique; honor me ved…
Qué triste la Gran Triste! Nada como la playa nativa existe que sea más triste. Su tristeza tiene vigor, ansia y pereza: ansia de la vida,