Si tan solo y simplemente a la orilla del lago nos sentamos y platicamos en la tarde caliente de lo que más nos gusta y divierte… Seria una tarde agradable,
Cuando el mar se retira sin sentid… la arena se va volando con el vien… De noche se consuela con estrellas… Y la luna brilla por ella. El sol cubre y reconforta,
Algas azules con cristales y coral… peces distantes nadando con mágica ternura. El agua se mueve a un tempo lento,… Ahí es donde quiero ser,
Ah, señor... Tan largas son sus líneas del tiem… que vagabundo es en un cuerpo roto… olvidado y ajeno. Sepultado en las mañanas frescas.
Ayer me dijiste imbécil. Fue hoy, en realidad. Ésto fue a las 4 de la mañana Y a lo largo de mi torpe llamada. Me lo dijiste muchas veces,
Reconozco este lugar desde el que reconocí que eras tu el compañero de mi alma. Donde cree pinturas con tu nombre, retratos de nuestras almas. No puedo dejar de visitar este lugar que c...
Si te veo, me ves. Y volteó porque estás, Pero luego ya no estás. Me asomo porque te quiero en encon… Y me asombra comprobar que en el á…
Escribir en tiempos dormidos, dren… Fluir con susurros del viento. Contruyendo formas de darle sentid… La única forma de nadar en medio d… No hay aviso para el vomito del al…
He dejado unos cuantos barcos que han zarpado. Se van flotando de un muelle rojo, Y al mar del olvido se están entre… Azules como mi alma,
Esa mañana libre que se desprendió… Que nos abatió y atesoró, como nid… Divinidad hecha carne. Y de tu espalda emanabas brillos d… Espuma de rosas y cielos flotantes…
La broma más cínica que he de vivi… La risa encontrada desde mis adent… Tan sarcástica y reveladora; Como un golpe profundo de mí para… Una película de bromas,
Es a ti a quien culpo de éste pesa… que no me deja dormir tranquila desde hace meses. Te pido que entiendas y razones mi… palabras, pues no son más que grit…
Quisiera que entiendas mi sentir, Aún después de meses, mi alma sigue recordándote pensando que volverás. Dime, por favor, que todo ésto es…
Con manitas de ángel, Reteniendo el agua en tus manos. Ojos de Lucero, sonrisa divina. Que puede transportar a cualquiera A la más grata dicha.
Amarillo que por doquier resonaba y cantaba fielmente un canto barroco de alegría e incertidumbre. Para los pies el peso del encuentro fue el más grande sacrificio, y a los minutos se q...