6 y media de la mañana la casa luce tan solitaria como silenciosa ante mis saludos de buenos días no contestados y entre tu tristeza y la mía por sus partida,
Me culpas de tus errores como siempre lo has hecho, sentados ya en la misma mesa intentas explicarme a tu modo, siempre librándote de casi todo…te muestras descontento ante el supuesto poco afecto.
Piensas que no me importa lo que te está pasando, te equivocas en eso... Pues aunque no lo creas estoy sintiendo lo mismo que tú en este momento puedo verlo en tu rostro y en el mío.
Siempre me has importado, siempre fuiste y serás el hombre que yo admiro, pero Dios no nos hizo perfectos,…y ante ello nos tenemos el uno al otro para decirnos cuando alguno de los dos erra…pues ya no soy aquel niño que podías cargar con un solo brazo o al que tal vez podías lanzar por el aire y tomar mientras caía, ahora somos tan parecidos solo que tú con un poco más de experiencia el cual no te garantiza tener siempre la razón y eso muy bien lo sabes…
Te admiro y te respeto ya no por el temor al castigo, sino porque te lo ganaste, me gustaría que podamos hablar de nosotros como grandes amigos, tengo tanto que contarte,…………. me gustaría decirte todo personalmente y romper esa falta de confianza que nos separa…
TE QUIERO PAPÁ...