#EscritoresEspañoles (1884) En Sar del las orillas
Triste loco de atar el que ama men… le llama al que ama más; y terco impenitente, al que no olv… el que puede olvidar. Del rico el pobre en su interior m…
En incesante encarnizada lucha, en pugilato eterno, unos tras otros al palenque vienen para luchar, seguidos del estruend… de los aplausos prodigados siempre
Tradución de “Cada Noite” de Ros… Cada noche llorando yo pensaba que esta noche tan larga no fuera, que durase y durase mientras la noche de las penas me envuelve…
Camino blanco, viejo camino, desigual, pedregoso y estrecho, donde el eco apacible resuena del arroyo que pasa bullendo, y en donde detiene su vuelo incons…
Pensaban que estaba ocioso en sus prisiones estrechas, y nunca estarlo ha podido quien firme al pie de la brecha, en guerra desesperada
La palabra y la idea... Hay un ab… entre ambas cosas, orador sublime. Si es que supiste amar, di: cuando… ¿no es verdad, no es verdad que en… Cuando has aborrecido, ¿no has gua…
Una cuerda tirante guarda mi seno que al menor viento lanza siempre… mas no repite nunca más que un son… monótono, vibrante, profundo y lle… Fue ayer y es hoy y siempre:
Ya que de la esperanza, para la vi… triste y descolorido ha llegado el… a mi morada oscura, desmantelada y… tornemos paso a paso, porque con su alegría no aumente m…
¡Silencio, los lebreles de la jauría maldita! No despertéis a la implacable fier… que duerme silenciosa en su guarid… ¿No veis que de sus garras
Cuando recuerdo del ancho bosque el mar dorado de hojas marchitas que en el otoño agita el viento con soplo blando, tan honda angustia nubla mi alma,
¡Cuán hermosa es tu vega, oh Padr… Mas el calor, la vida juvenil y la… que extraje de tu seno, como el sediento niño el dulce jug… del pecho blanco y lleno,
Sintiéndose acabar con el estío la desahuciada enferma, —¡Moriré en el otoño! —pensó entre melancólica y content… y sentiré rodar sobre mi tumba
Dicen que no hablan las plantas, n… Ni el onda con sus rumores, ni con… Lo dicen, pero no es cierto, pues… De mí murmuran y exclaman: —Ahí va la loca soñando
En las riberas vagando de la mar, las verdes olas mira Argelina y contando las horas que van pasando vierte lágrimas a solas.
¡Oh, gloria!, deidad vana cual tod… que en el orgullo humano tienen al… jamás te rendí culto, jamás mi fre… se inclinó de tu trono ante el dos… En el dintel oscuro de mi pobre mo…