El primero de enero, tararí, será tan gris como un jueves cualq… sin Drácula escalando el Pirulí, ni marcianos cruzando la frontera. Más de lo mismo bajo el cielo añil…

Del imperio austro-húngaro, estreñ… por falta de sonrisas verticales, a Tombuctú, provincia del olvido, partió don Luis, en bici de pedale… Pero, si el arcabuz de cierta estr…

Mañana cuando era tan pequeño por el Acantilado del Obispo caí persiguiendo un pájaro sin dueño y aterricé en un polvorín de arenas movedizas

Tú de farol, yo manco de una sota, tú rica en vitaminas, yo desnudo, tu carne de gallina, yo de jota, tú huérfana de novio, yo viudo. Tu cuento de calleja, yo en la ino…

Que el maquillaje no apague tu ris… que el equipaje no lastre tus alas… que el calendario no venga con pri… que el diccionario detenga las bal… Que las persianas corrijan la auro…

Aquel año mayo duró doce meses tú y yo acabábamos de nacer y un señor muy serio moría del dis… en la primera página del ABC los claveles mordían a los magistr…

Vencido sin honor en mas combates que Aureliano, el menor de los Bu… harto de biselarte escaparates a los charlines de la hipocresia, hastiado del servil dime y direte

Malditos sean los bienes ganancial… los sostenes a guisa de trincheras… los penes con tres puntos cardenal… la meca que divide tus caderas, los que arriman el ascua a las rui…

Benditas sean las raras excepcione… los moratones de los vulnerables, los labios que aprovechan los rinc… más olvidados, más inolvidables, benditos sean, benditos sean.

Bendito sea el sello de los sobres de las cartas que llegan a tus man… la sopa del cocido de los pobres, la ropa que te quitan los veranos. Benditos sean los gordos maricones…

Tus mohines son menos inocentes que tus patines y tus espinillas, líbreme Alá de las adolescentes sagitario, con rímel y en cuclilla… Declino estar un mes con agujetas

Recuerdo que tenía un corazón Alérgico a los pólenes La muerte no existía Éramos asquerosamente jóvenes Veranos sin deberes

Regreso al tiempo en que te conocí cuando el mundo acababa en tu jard… yo era el cowboy más duro de la Un… y tú la bailarina del salón. Todas te aventajaban en virtud

Estábamos en lo mejor cuando sonó el despertador como un jarro de agua fría. El vino dulce del placer se avinagró sobre tu piel

Ese tipo que va al club de golf, Si lo hubieras visto ayer, Dando gritos de “yankie go home” Coreando slogans de Fidel. Hoy tiene un adoquín