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Sentir de esta ciudad

04/11/2010

Llueve lentamente, así como también
nos rodea el frío de nuestros cuerpos.
Las sirenas por la calle
silencian el sonido de la lluvia al caer.
La abrumadora soledad
me hace sentir mucho más gris este día.
Estoy en un ocaso imparable
que deja apagar cada vez más
la poca luz que nos queda,
es así como se despide el día
y nos saluda la noche,
fría, sombría, pero acogedora.
Pienso y te pienso
en la comodidad del hogar,
con la noche como compañía.
Preferido o celebrado por...
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