Del poemario Materia prima (2003)
La plantan al frente de la nave tal vez parezca inmóvil pero debe hacerse cargo del timón. Sobrevienen tempestades
¿Hacerle caso al obsceno hastío de… El cielo y el infierno y en el med… y seguirle la huella al alarido de… para atrapar el viento.
Y me quedaré aquí hasta que digas… me siento sola (del participio femenino singular,… desolada de sin sol ni Solentiname me voy a casa
Entre los surcos de las espinas de calafate confieso la aridez pueblerina. Sólo el piño ovejero renació
Es un tembloroso papel hecho pétal… ese artefacto realizado con letras trastornadas de luz emulsionadas de emoción preludiadas con sonidos.
Se trata de que no duela tanto abismal quietud veloz para que no duela tanto esta noche en pleno día este azar sin fronteras.
Sangra la desolación de las certez… duelen las vacilaciones de fragmen… abordan los manotazos de mejor air… renuncia la respiración artificial grisea el rastro humano en estéril…
Buenos Aires reluce hermosa complaciente de edificios de acero y cristal. Camino por Córdoba desde el bajo urbano sístole y diástole.
Sentí la alegría de Einstein sacando la lengua a los científico… hice la caminata en busca de la sa… bailé junto a aquellos jóvenes esp… la creación en el ´48 del Estado d…
Ante una tormenta siempre el azaroso silencio para susurrar el antiguo dolor de estar viva. Los lugares las distancias
Desertaba de las tardes de todos trepaba la escalera de atrás riéndose con los jazmines reconociendo el vaivén del sol desnudo
Plegaria rítmica matemática hermosa desde la otra orilla de la corriente que impide del terror que detiene de las sombras de la locura
Siempre el mismo es el eco de los ecos de un solo eco más ligado al ultraje
Tren que siempre está por salir en esa décima de intuitivo fragor anterior a la partida donde eterna quietud de manos despobladas
Llanura cielo y agua en mi ojos. Paciencia verde pampa infinita.