Invernaderos
Hay un clima de iglesia en la bóveda
mientras se funde la miel en los panales;
y la mirra es el perfume del tósigo.
No importan cuan desnudos,
se aliñan,
prestos al horno.
Gea, impávida, abre su boca terrea
y agita sus blanduras;
viene la siega;
será una gran cosecha
y los hombres de rodillas
se cubrirán del vómito
de quien los viste y alimenta...
No hay Saturnos que se coman a sus hijos
nos hemos devorado a la madre
después de violarla
repetida
mente
hasta la náusea
sin escrúpulos...
Mientras afilan espadas y cuchillos
e imitan fumarolas con sus Nobel
el ambiente matarífe
cierra a cal y canto su invernadero.
Mientras Eolo se enreda en las astas
de metálicas libélulas
y calla
como los pájaros;
Febo;
preso;
en las celdas de las granjas
nos recuerda la segunda ley.
La Termodinámica es infalible
como Newton...
y Tycho
Y Moisés
Y Leibnitz
Y Mendeleiev
....
y Darwin.
Como preparar al hombre;
no era la receta de los sabios
los justos y los piadosos;
sino de un cocinero sideral que nos espera
allá donde los fuegos no se enfrían.
