#EscritoresCamagüeyanos #EscritoresCubanos
Los prospectos turísticos siempre tienen razón. La prueba: esta frase, leída en un folleto rojizo, de tipografía brumosa: «Dejarás a Benarés, pero Benarés no te dejará. Algo en ti, aden...
Tanto arder, tanto valor tanto ataque y retirada ante ese umbral en que nada alivia más el dolor que su incremento. O mejor:
Aunque ungiste el umbral y ensaliv… no pudo penetrar, lamida y suave, ni siquiera calar tan vasta nave, por su volumen como por su lastre. Burlada mi cautela y en contraste
La letra con sangre entra como el amor. Mas no dura en el cuerpo la escritura, ni con esa herida encuentra paz el amante. Se adentra
El amor es decir: “Ven a mi casa y comparte conmigo la luz y la pal… Disfruta de mi paz, habla tu idiom… que es como el mío cuando tú lo ha… El amor es decir: “Ven a mi mesa
Las galaxias parecen alejarse unas… considerables. Las más lejanas huyen con la acele… treinta mil kilómetros por segundo… próxima a la de la luz.
Tu cuerpo se recortaba contra la persiana oscura trazando una línea pura –la del torso– que ondulaba con tus gestos. La chilaba
Caminando por siete mundos, Recostado a un silencio, Que no hay voz que lo rompa, Ni ser que lo divida, Inestable e inexacto,
Hoy comprendo que existe aún ese m… que había, como un libro, ya olvid… sobre varias ventanas, del profund… balcón descienden flores, es dorad… el aire que presides. Me sorprendo
La noche está callada. Marte más rojo que nunca. Las pencas de coco forman un ángul… .........., y yo .................… seco,
No por azar, por gusto del dislate ni por obedecer a una figura, habló de una cegante noche oscura. Que toda exaltación o disparate aparente, se indague, y no se ciña
Omítemela más que lo omitido cuando alcanza y define su aporía, enciende en el reverso de su día un planeta en la noche del sentido… A pulso no: que no disfruta herido…
¡No es cierto lo que dicen! No he matado a cien personas. Sólo a unas cuarenta, y otras veinte torturadas... es decir, veintidós, porque había dos niños, ahora que recuerdo. Pues bien, ...
El coro de sopranos pintarrajeados entona tu loa: “Te comiste un Zohar te comiste un Corán.” Y de tu mano de azogue
Muera quien tiñe el asfalto de sangre tibia y espesa, muera el chacal que de un salto se apodera de su presa, muera quien humilde besa