#Cantautores #Cubanos #TrovaCubana
Favor, no se molesten, que pronto me estoy yendo. No vine a perturbarles y menos a ofenderlos. Vi luz en las ventanas
Ojalá que las hojas no te toquen e… para que no las puedas convertir e… Ojalá que la lluvia deje de ser mi… Ojalá que la luna pueda salir sin… Ojalá que la tierra no te bese los…
Desde los tiempos más remotos vuelan los ángeles guardianes siempre celosos de sus votos contra atropellos y desmanes. Junto a las cunas infantiles,
Ya no te espero. Llegarás, pero más fuerte. Más violenta la corriente dibujándose en el suelo de mi pecho, de mis dedos.
Debiera bastar con inventar tus oj… debiera bastar con hacerlos vivir. Tus ojos abiertos son como tu hist… van solos contando mil cosas de ti… Los veo cual si viera la esfera de…
He estado al alcance de todos los… porque no cuesta nada mirarse para… He estado al alcance de todas las… que han querido tocar mi mano amig… Pero, pobre de mí, no he estado co…
Vivo en un país libre cual solamen… en esta tierra, en este instante, y soy feliz por que soy gigante. Amo a una mujer clara que amo y me… O casi nada, que no es lo mismo pe…
En el borde del camino hay una sil… la rapiña merodea aquel lugar. La casaca del amigo esta tendida, el amigo no se sienta a descansar. Sus zapatos, de gastados, son espe…
Cuando Pedro salió a su ventana no sabía —mi amor, no sabía— que la luz de esa clara mañana era luz de su último día. Y las causas lo fueron cercando
Hoy mi deber era cantarle a la patria alzar la bandera sumarme a la plaza. Hoy era un momento
Te amaré, te amaré como al mundo. Te amaré aunque tenga final. Te amaré, te amaré en lo profundo. Te amaré como tengo que amar. Te amaré, te amaré como pueda.
Disfruté tanto tanto cada parte y gocé tanto tanto cada todo que me duele algo menos cuando par… porque aquí te me quedas de algún… Ojalá nunca sepas cuánto amaba
No hacen falta alas Para hacer un sueño Basta con las manos Basta con el pecho Basta con las piernas
Los caldeos, los asirios, la Roma… supieron resumir mejor; los helenos, los egipcios, los hij… ya estaban conversando del amor. Hubo templos y ciudades sólo para…
Llueve otra vez detrás de mis fron… Entre oreja y oreja nubes bajas, oscuras como cajas, se disfrazan de fieros animales. Una mujer he visto cuatro veces