Vengo a verte pasar todos los días… vaporcito encantado siempre lejos.… ¡Tus ojos son dos rubios capitanes… tu labio es un brevísimo pañuelo rojo que ondea en un adiós de sang…

El suertero que grita “La de a mi… contiene no sé qué fondo de Dios. Pasan todos los labios. El hastío despunta en una arruga su ya no. Pasa el suertero que atesora, acas…

Silencio. Aquí se ha hecho ya de… ya tras del cementerio se fue el s… aquí se está llorando a mil pupila… no vuelvas; ya murió mi corazón. Silencio. Aquí ya todo está vesti…

—Hay, madre, un sitio en el mundo,… sitio muy grande y lejano y otra v… Mi madre me ajusta el cuello del a… nevar, sino para que empiece a nev… La mujer de mi padre está enamorad…

Qué estará haciendo esta hora mi a… ahora que me asfixia Bizancio, y q… la sangre, como flojo cognac, dent… Dónde estarán sus manos que en act… planchaban en las tardes blancuras…

El puño labrador se aterciopela, y en cruz en cada labio se aperfil… Es fiesta! El ritmo del arado vue… y es un chantre de bronce cada esq… Afílase lo rudo. Habla escarcela.…

Siento a Dios que camina tan en mí, con la tarde y con el m… Con él nos vamos juntos. Anochece… Con él anochecemos, Orfandad... Pero yo siento a Dios. Y hasta pa…

Un hombre dijo: —El momento mas grave de mi vida e… Marne, cuando fui herido en el pec… Otro hombre dijo: —El momento más grave de mi vida,…

A trastear, Hélpide dulce, escamp… cómo quedamos de tan quedarnos. Hoy vienes apenas me he levantado. El establo está divinamente meado y excrementido por la vaca inocent…

Se acabó el extraño, con quien, ta… la noche, regresabas parla y parla… Ya no habrá quien me aguarde, dispuesto mi lugar, bueno lo malo. Se acabó la calurosa tarde;

Cual mi explicación. Esto me lacera de tempranía. Esa manera de caminar por los trap… Esos corajosos brutos como postizo… Esa goma que pega el azogue al ade…

Hay golpes en la vida, tan fuertes… Golpes como del odio de Dios; com… la resaca de todo lo sufrido se empozara en el alma... ¡Yo no s… Son pocos; pero son... Abren zanj…

¿Quién no tiene su vestido azul? ¿Quién no almuerza y no toma el tr… con su cigarrillo contratado y su… ¡Yo que tan sólo he nacido! ¡Yo que tan sólo he nacido!

¡Y si después de tantas palabras, no sobrevive la palabra! ¡Si después de las alas de los páj… no sobrevive el pájaro parado! ¡Más valdría, en verdad,

Los mineros salieron de la mina remontando sus ruinas venideras, fajaron su salud con estampidos y, elaborando su función mental cerraron con sus voces