Recordandote
Una vez fui Santa,
Cabalgaba sobre tu cuerpo divino, con gracia, con júbilo
Una vez, tuvimos múltiples ceremonias de entrega
Una vez, nos agotabamos de rodillas, rezándonos
Orando a nuestros divinos rostros
Orando a nuestro vínculo, a nuestra cercanía
Una vez, penetrarnos y roernos,
Llevarnos al llanto
Llevarnos al extasis
Fue celestial, fue pureza
Todo era claridad, armonía
Nuestros cuerpos castos
No cometieron nunca pecado alguno
Fuimos más transparentes que la brisa de la mañana
Fuimos animales amantes,
Vagando por el mundo, inocentes, sin mancha
Nada jamás nos perturbó
Hasta que el demonio tiempo
Te dio a probar la dulce fruta del abismo
Caímos de nuestro cielo azul
Nos destruimos
Nos desgarramos y ensuciamos
Nos separamos para siempre
Para mi ya nada será como antes
Me lavo los ojos todos los días
Todo es sucio y maltrecho
Ya no hay pureza
