Yo, Lilith, aire y viento, Lilith, noche de negra luna, viajera del tiempo, en eterna búsqueda de ti, Adán, de tu cuerpo, de tu espíritu y tu sangre; hay días en que siento que ya no h...
Ya de tanto amar se me ha formado… No estás para leerlo ni yo para es… pero has de saber que nomás de ext… ya tengo el corazón amarillo, sali…
Te amaba en tu lamento, en tu murmullo, en tu engaño... Te tocaba como a fruta prohibida en tu cama, en tu mesa o en la banca de un jardín...
Existe en lo más profundo de las llamas de la tierra un reino llamado Escorpio, hecho de fuego y de mantos luminosos. Allí habita Escórpora, el señor de las brasas, de cuerpo de rubí, ...
Tú eres mi más dulce momento, noche de pájaros y olas en que siento llegar la muerte. Si me sumerjo y te desgarro,
¡Ah! Infinita interjección de dol… como la cómplice más fiel de todas… más triste que ¡ay!, más sola que… como la “y” o la “o”... Qué desalm… con cuánta desesperanza emerges de…
Las sirenas están llorando en el mar; ha muerto el rey de los tritones, y su risa ya no sonará más entre los océanos, ni su mirada azul iluminará las aguas. Los lamentos llenos de melan...
Nos amábamos en el despertar de lo… en el murmullo de los pájaros en f… en los lirios encendidos por la ta… en el otoño de palomas, en tu lech… Nos amábamos en el verdor de nuest…
¿Y si ella volviera un día? Oh, Dios mío, me encontraría sin… Correría a lavarme la cara al río,… Desenterraría mi libro más querido… Reviviría mis sueños, que tanto ma…
Cuando vayas a París, lleva siempre en tu equipaje cielo rosa en mis canciones, palabras azules en tu boca. Silencio en mis ojos de aluminio,
Hay cuervos en el puerto. Esperan con paciencia la llegada de los marineros que traen el cuerpo muerto del pescador. Murió hoy de madrugada, al apagarse las estrellas. Llevaba en su cue...
Escribo para los muertos, para los que ya no tienen memoria y sólo son presente; para los que sólo me escuchan y no pronuncian mi nombre.
Amanece mi alma, como si la noche la hubiese pasado en un infierno, y al mirarme en el río, me descubro los ojos lóbregos y húmedos como los del caracol; en efecto, he dormido con sueño...
Tu nombre suena como parvada de pá… como un amor suave de lirios. Duerme en mi costilla, en mi ombligo y en mi memoria. Tu nombre es de añoranza y melanco…
Este libro es una historia de cari… de besos amarillos en el mar, de cantos dormidos en las nubes de… Es un libro que no todos entienden… porque nació una mañana de rocío e…