Haiku 45
Sept/22/2018
#Haiku
La calle está vacía. Es noche oscura, sin luna. Solo veo las luces
La vieja mecedora, languidece en u… “Todos la miran y nadie la ve” Ni siquiera con el aura de recuerd… Aquella vieja mecedora arropó a mu… Fue testigo y confidente de alegrí…
En aquella capilla medieval había un viejo sótano y ella, (una chica joven llena de curiosidad), no dudó en bajar la fría escalera hasta adentrarse en esa estancia lúgubre con olor a si...
Lástima siento, bella flor de un d… que irradias tanto encanto y lozan… naces hoy, pronto te verás marchit… vertiendo esa fragancia de Afrodit… Tan suave, bella y dulce como miel…
El sonido del agua contra los cris… de forma armoniosa y continua, arrulla con dulzura musical mis se… Y...disfruto casi como una adolesc… simplemente tocando el vidrio frío…
Y yo aún aquí, mientras canta la alondra y nace el día.
Regreso como cada día por esa calle tan habitual, siempre a la misma hora, como inevitable rutina a la que nos somete la vida. Encima de mí, un cielo de invierno donde no se oye el cant...
Viejo reloj, que gira sin cesar, evoca al tiempo.
Así, se nos va la vida. Así, nos llega la muerte...
Si los sueños se pudiesen escoger y la vida fuese la manifestación de ellos, no habría por qué sufrir;
La mentira y la verdad, suelen ser o no creíbles. Todo depende del momento en que se digan.
Suave cadencia, tibio frescor que abraza. ¡Así es mi mar! Siempre sueño con él, siempre... me pierdo en él.
¡En el silencio! siento el cálido arrullo de las palomas.
Noche de insomnio, gotas de agua que caen. ¡Quiero dormir!
No soy perfecta, la perfección no es vida. Es obsesión, y eso, ya es un defecto. ¡Errar para vivir!