LA HEMBRA DEL PESCADOR A la orilla de la playa tropical saturada de arena y sal es la hembra del pescador murmuran en salitroso lugar
Estar cautivado por el amor y sus locuras alucinantes, que imaginan luces y sombras que cautivan, que escucha gritos y murmullos que incriminan.
Estar atrapado en los minutos absolutos
En el mar de Adícora un mar de gran oleaje de moderadas mareas y de turbulentas aguas que protegen e hidratan
Estar apartado en algún lugar Íngrimo y sólo enfermo sin medicinas rendido sin fe y sin esperanzas
Estar enamorado de una fina y bella
SE HUNDE EL BARCO El huracán, pandilla de vientos con rayos que prenden hogueras centellas que alumbran tinieblas y truenos que rompen silencios.
Me impulsa ….el latido natural de ambos corazones que palpitan incesantes
AGUAS… ...del rocío de la mañana ...de la frescura tropical ...de tibias aguas termales ...de lluvias que caen del cielo
La dama que sueña.. Señora que sueña y cuenta dudas intangibles, vivencias oníricas y siniestras pesadillas.
Mar de Adícora… Pronósticos del mar de un mar de fondo de un mar tendido de un mar de leva
Contigo aprendí a respirar alcancé el lapso exacto en que sustituía el aire puro de tus flácidos, débiles, atrofiados e insuficientes pulmones.
Estar extraño, raro, inaudito, invisible e intolerable en un insólito, absurdo
Estar descansando en un lugar quieto,
Estar en un lugar mudo, sordo, ignorado y traicionado.
