(1996)
La casa de mis abuelos Huele a jazmines, a veces a rosas otras a “no me olvides”. La casa de mis abuelos
En la cueva del quirquincho se metió una vizcacha, porque le prestó los anteojos a su amiga cucaracha. —¿Qué ha pasado con mi mesa,
¡Albricias pequeñuelos! Llegaron los abuelos. Corrían cinco niños en busca del amor. Caricias de ternuras
La Madre La madre; es el ser que te alimenta desde su vientre. Es la que se desvela por las noche… acunando a su niño con amor y tern…
Yo tengo un perrito que se llama Kin-Kong. Se lava la carita con agua y con jabón. Le corto sus uñitas,
La poesía son conjuntos de palabras que encadenan con rima La belleza del alma Iluminan los ojos
EL AMIGO Entre un día ha una casa humilde, con aroma a perfume de quebracho quemado,
Canta, mi bruja canta en su casita del bosque, donde duermen las lechuzas que trabajan por las noches. Canta, mi bruja canta
Al ocaso del sol, mis ojos cansados cerraran sus parpados tristes, agotados. Al ocaso del sol,
Quisiera ser pájaro; posarme en lo alto de un árbol vie… cuanto más robusto cuanto mas añej… Agitar mis alas, hacia el mar del… planear decidida, en silencio, int…
En el rancho de la vicha que nadie quiere nombrar se escuchó una ranchera y un grito de sapucay. —¿Qué pasará en ese rancho?—
¡Qué linda está la luna con su sombrero estrellado! Imagino sus dos ojitos porque estoy enamorado. Creo que voy viajando
Llegaba una bandada de teros a ese hermoso lugar. Pasaban y saludaban con su canto peculiar. —¡Van llegando!
Se paró y dijo un chascarrillo una lechuza mal humorada, gritándole a los grillos que entre los pastos cantaban. Otra lechuza recostada
En el árbol del manzano vivía una oruga vieja. Se comía las manzanas, los tomates y la acelga. Andaba por todos lados