Sin tapujo
Me nació decir mamadas.
Las que me dabas
Porque sobre todo,
Eras bien mamona.
Le diré al pinche mundo que eras una culera.
Para que te castigue con el afán de sus vientos y sus bestias.
Le diré al pinche mundo que te amé dulcemente
Para que los mismos vientos te azoten y te excites y las bestias te flagelen hasta el orgasmo.
Porque sé que te encanta eso.
Que te sometan contra un muro y de entre el lujo de violencia y sexualidad aflore un dulce hilo taciturno que te deje saber que no hay cosa que disfrute más que estar dentro de ti.
Y me quede en blanquecinos techos, dentro de las paredes de tu puente a la favorita de tus vocales.
Le diré al pinche mundo que te extraño intensamente
Para ver si los dichosos vientos te traen de regreso a esta bestia que soy toda noche que añoro tu abrazo.
Porque por mucho amor, espíritu, deseo y romanticismo soy un humano y de coger tengo más ganas que de dedicarte un poema.
