Río de las Siete Estrellas, camino del Libertador, sangre del Corazón de América, ¡aorta que no sale del corazón! Río delgado de las fuentes

Desde el árbol más alto, donde se… colgado de la cola al pico de una… con las manos tendidas, nos saluda…

Madre, si me matan, que no venga el hombre de las sill… que no vengan todos a pasar la noc… rumiando pesares, mientras tú me l… que no esté la sala con los cuatro…

La última noche que pasamos juntos… lo preguntó: —¿Cuántas estrellas tiene el cielo… —Trescientas cincuenta mil. —¿A que no?

De Chachopo a Apartadero caminas, Luz Caraballo, con violeticas de mayo, con carneritos de enero; inviernos del ventisquero,

Ya rindió una jornada la fiebre de… y aún están los leones de mi numen… los músculos alertas para nuevos z… y firmes los pulmones para nuevos…

Cuando tú te quedes muda, cuando yo me quede ciego, nos quedarán las manos y el silencio. Cuando tú te pongas vieja,

Alacrán de orilla. comadre de orillera, oculta, como una mala intención, enconosa, como una mala lengua. Quizá no entra al Río

Me das tu pan en tu mano amasado, me das tu pan en tu fogón cocido, me das tu pan en tu piedra molido, me das tu pan en tu pilón pilado. Me das tu rancho en tu palma arrop…

¡Ah mundo! La negra Juana, ¡la mano que le pasó! Se le murió su negrito, sí, señor. —Ay, compadrito del alma,

La Parima es el sueño faraónico y la piedra de Moisés, el panal negro de la Hermana, que el Hermano Francisco no vino… Catedral del misterio, Sierra del…

La diezmillonésima parte de un tiburón multiplicada diez millones de vece… El Caribe es la distancia más cor… que hay del Río a la Muerte.

Luna de abril, descotada, con aguazal circunscrito, desnuda, con desnudez pura de pecho con niño. Luna llena, ubre de vaca,

Y ahora, vuelvo los ojos hacia la síntesis del Canto, hacia la barca del Pretérito, de parda vela y el bauprés sangrad… tu propia barca, donde tú venías,