COMO LO MANDE USTED, MI… ¿Quién nos asegura que todo lo que existe tuvo que existir? ¿Quién hace los cálculos
ESPOSA Grata como la fruta sazonada, buena como la lluvia campesina, esta mujer que mi dolor termina y que me deja el alma sosegada,
JESÚS Hijo de Dios y para el hombre arc… para darle grandeza a lo pequeño tomó para morir, clavado al leño, toda la carga del pecado humano.
BAILARINAS DE NOTAS H… EN NOCHES DECENBRINA… Volando sobre notas hechizadas, bajo el beso de pálida Selene, que las viste del oro que proviene
CANTO DE ESPERANZA Empecemos a ser, ahora,... en el i… nosotros mismos y nuestra propia e… Estemos en futuro, en presente y e… y nunca jamás en parcelas del tiem…
CANTO PARA TI No omitiré decirte que te quiero, no omitiré decir que te he querido… para que mi dolor hable a tu oído y sepas que de amor por ti me muer…
CAMINANTE! CAMINERO! Caminante, ¡caminero!, dos puntas tiene el camino; por eso si de primero, caminas a tu destino
NECESITE DOS VIDAS Necesité dos vidas, para vivir apenas, la mitad de una vida. Necesité dos veces recorrer el cam…
RELOJ Vas moliendo las horas, inclement… para hacer cataplasmas del olvido, que borren de los ojos y el oído las agudas dolencias del presente…
CANTO A CARTAGENA DE IN… Desde la orilla desolada de mi arroyo, pienso en la grandeza azul y comba que besa tus arenas.
A MI PADRE ISMAEL BU… Heredé la tristeza de tu verso; el modo tuyo de decir las cosas, el modo tuyo de mirar las rosas, y amar la infinitud del Universo.
CON MANOS PRODIGIOSAS Con manos prodigiosas, el Señor, el Universo en siglos muchos hizo; primero la energía, la materia lue… que es una forma de energía tambié…
DE SAN JUAN NEPOMUCE… Te di cuando naciste, la luz para… aliento a tus pulmones, el olor de… el canto del canario, las notas de… la queja monocorde del grillo en m…
A DIOS, INCOMPRENSIBLE. Mejor creer en ti, sin argumento que, lógico, llegar a una aporía; porque contigo es dulce la agonía y aminora, contigo, mi tormento.
HÉCTOR ROJAS HERAZO La fragancia de mi jardín exiguo, exhalada por las rosas de mis tar… que, rebeldes, se niegan a morir, con ansias recónditas e intensas,